Los embargan por un robo que cometió su hijo
Los padres de un chico que le robó a sus vecinos en 2007 fueron embargados por la justicia y ahora deberán pagarle una indemnización de su departamento.
El hecho ocurrió el 12 de abril de 2007 en un edificio de la calle Ecuador al 400, en Once, cuando un joven, que en aquella oportunidad tenía 17 años, se quedó con un juego de llaves de su vecino y junto a otro cómplice –también menor- ingresó a robar.
El joven era amigo desde chiquito del hijo del matrimonio vecino y había mucha confianza. Por eso, al mínimo descuido, el ladrón se quedó con las llaves para ingresar luego y llevarse un televisor de 29 pulgadas, un reproductor de DVD, una computadora, una impresora, una filmadora, una cámara digital, un discman y varios CD que contenían fotos y videos privados.
Lo que no se dieron cuenta los jóvenes fue que, al llevarse las cosas por la puerta principal del edificio, fueron vistos por los vecinos y por ende fácilmente reconocidos.
Tres años después, un juez civil hizo lugar a una demanda por daños y perjuicios presentada por la familia asaltada e hizo responsable del pago de la indemnización a los chicos pero también a los padres.
El fallo, firmado por el juez en lo Civil número 15 de Capital Federal, ordena que se le paguen 7.000 pesos en concepto de daño material y 15.000 por daño moral al matrimonio robado, pero a esta cifra se le deben sumar los intereses, que llevan el monto a unos 28.000 pesos.
Debido a esta enorme cifra, el magistrado ordenó el embargo de los departamentos de donde vivían los dos delincuentes. “Tanto los adolescentes –que en la etapa penal pactaron una probation– como sus padres son 'solidarios' de esta indemnización. Por lo pronto se le embargó el departamento al vecino de la víctima, porque fue el único bien que pudimos rastrear", dijo Paola Eléspuru, abogada de los demandantes.
El joven era amigo desde chiquito del hijo del matrimonio vecino y había mucha confianza. Por eso, al mínimo descuido, el ladrón se quedó con las llaves para ingresar luego y llevarse un televisor de 29 pulgadas, un reproductor de DVD, una computadora, una impresora, una filmadora, una cámara digital, un discman y varios CD que contenían fotos y videos privados.
Lo que no se dieron cuenta los jóvenes fue que, al llevarse las cosas por la puerta principal del edificio, fueron vistos por los vecinos y por ende fácilmente reconocidos.
Tres años después, un juez civil hizo lugar a una demanda por daños y perjuicios presentada por la familia asaltada e hizo responsable del pago de la indemnización a los chicos pero también a los padres.
El fallo, firmado por el juez en lo Civil número 15 de Capital Federal, ordena que se le paguen 7.000 pesos en concepto de daño material y 15.000 por daño moral al matrimonio robado, pero a esta cifra se le deben sumar los intereses, que llevan el monto a unos 28.000 pesos.
Debido a esta enorme cifra, el magistrado ordenó el embargo de los departamentos de donde vivían los dos delincuentes. “Tanto los adolescentes –que en la etapa penal pactaron una probation– como sus padres son 'solidarios' de esta indemnización. Por lo pronto se le embargó el departamento al vecino de la víctima, porque fue el único bien que pudimos rastrear", dijo Paola Eléspuru, abogada de los demandantes.