Los detalles de la salud y la nueva rutina de Mauricio Macri luego de la arritmia
Cómo la rutina, la dieta y los cuidados del jefe de Estado cambiaron tras el desperfecto cardiológico.
La intervención médica, a pesar de las complejidades que supone el protocolo presidencial, no pasó de una desfibrilación, para la cual Macri fue anestesiado. Este procedimiento consiste en emitir un impulso de corriente continua al corazón. Si bien le sugirieron quedarse en la clínica por 48 horas, decidió volver a su casa.
La nueva rutina: dietas y cuidados
Zanjado el inconveniente médico, que desató fuertes contrapuntos por el manejo de la información que realizó el Gobierno, Macri inició una nueva rutina para así evitar riesgos futuros, la cual incluye una dieta y el consumo de un medicamento.
Se levanta todos los días a las 6.30 en la Quinta de Olivos, desayuna y corre en el gimnasio. Los fines de semana juega al paddle con amigos en Los Abrojos, aunque todavía no volvió a jugar al fútbol, una de sus pasiones.
A las 8 llega a la Casa Rosada, donde trabaja hasta las 20. La actividad laboral sigue hasta las 12 de la noche por vía telefónica o WhatsApp. Además, el Presidente tiene vedado el tabaco y el alcohol. Solamente come ensalada, bife, salmón, gazpacho de tomate y manzana.
En cuanto a la medicina, Macri debe consumir un remedio antiarrítmico y le realizan electrocardiogramas semanales. Dentro de un mes le harán un Holter.
Salud presidencial
"El Presidente es muy poco meticuloso con su salud, suele restarle importancia", afirma la revista Noticias sobre la base de testimonios de allegados al jefe de Estado. Lo cierto es que el gobierno desgasta a los políticos, basta con repasar los antecedentes médicos de Carlos Menem, Fernando De la Rúa y Néstor y Cristina Kirchner.
Menem fue operado de la carótida en 1993, De la Rúa fue intervenido por angioplastia en 2001, Néstor Kirchner sufrió un paro cardíaco y murió en 2010. Por su parte, Cristina Kirchner tuvo una lesión cerebrovascular en 2013.
Muy lejos de correr riesgo su vida, estos seis meses de gobierno ya le pasaron facturas al aspecto de Macri. En seis meses de gobierno su cantidad de canas aumentó considerablemente, las arrugas se profundizaron y su mirada adquirió signos de cansancio. "El corazón de Macri está bien, es un corazón sano", dice el director de la Unidad Médica Presidencial, Simón Salzberg.