Los colaboradores de Ginés González García en el vacunatorio VIP también se inmunizaron como “personal de salud”

El escándalo en torno al vacunatorio VIP del Ministerio de Salud, que Alberto Fernández buscó controlar el viernes con la salida de Ginés González García, parece no encontrar su techo.

Tal fue la escalada que la Casa Rosada se vio obligada este lunes a anunciar que a lo largo del día publicaría el listado de vacunados en el Hospital Posadas, desde donde salían las dosis para el ministerio donde el jueves pasado se montó un operativo secreto, detallado por este diario, para la inmunización de funcionarios, dirigentes y amigos del saliente funcionario.

Como publicó Clarín en las últimas horas, González García no era el único que disponía y repartía privilegios. Su mano derecha, sobrino y jefe de gabinete, Lisandro Bonelli -que recién renunció a su cargo este lunes, tres días después de que estalló el escándalo-, también manejaba a discreción el acceso a las vacunas. Junto a Marcelo Guille, empleado por el ministerio y director suplente de la sociedad Carpor SA, creada por González García y Bonelli, y Claudio Miguel D'Amico, que trabaja en la cartera de Salud y que apenas asumió en la gestión el echado ministro lo pidió en comisión desde el PAMI a la Secretaría de Equidad del ministerio.

Según información de los registros oficiales, tanto Bonelli -oriundo de San Nicolás-, como Guille y D'Amico ya fueron inoculados con la vacuna Sputnik V. Con un agregado: este último lo hizo el pasado jueves 18, durante el operativo secreto llevado a cabo por especialistas del Hospital Posadas y montado en el ministerio para inmunizar, entre otros, al empresario Florencio Aldrey Iglesias y parte de su familia, al periodista Horacio Verbitsky y a los legisladores Eduardo Valdés y Jorge Taiana.

Con 55 años, D'Amico se vacunó el jueves, según los registros, como "personal de salud". La misma metodología que las autoridades utilizaron para justificar la inmunización de Carlos Zannini, el procurador del Tesoro, que pasó por el Posadas y recibió la vacuna el 21 de enero. El mismo día que el Presidente, su secretario de Comunicación, Juan Pablo Biondi, y el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello, justificados estos últimos por el médico presidencial por la cercanía con el jefe de Estado.

Lo llamativo es que, por ejemplo, ni Santiago Cafiero ni Vilma Ibarra, dos funcionarios de contacto diario y estrecho con Fernández, fueron inmunizados. 

Bonelli, en tanto, se vacunó el 11 de enero por primera vez y recibió la segunda dosis el 2 de febrero. En el caso de Guille recibió solo la primera dosis, el 13 de enero, tal como publicó el sitio Infobae.

El sobrino del echado ministro, que según trascendió volvería a la Cámara de Diputados bonaerense, tenía plenos poderes. Y logró que tanto los otros dos colaboradores mencionados como la plana mayor del ministerio tuvieran acceso a las vacunas en los primeros cargamentos que llegaron al país provenientes de Rusia. Entre ellos Martín Sabignoso, que también presentó su renuncia este lunes. 

Ahora, Carla Vizzotti, que reemplazó a González García en medio del escándalo -juró el sábado a la tarde, en Olivos, antes del viaje del Presidente a México-, está abocada a la revisión del organigrama para avanzar en una purga ministerial de todos aquellos funcionarios. Entre ellos, los asesores del saliente ministro que disponían de la vacunación VIP.

El escándalo, que destapó Verbitsky una vez que el Gobierno conoció en la noche del jueves que este diario avanzaba con un informe vinculado al operativo secreto del jueves, copó por completo la agenda oficial. En medio de la gira por México. Y del puntapié inicial del Consejo Económico y Social, que el Gobierno esperaba exprimir durante todo el fin de semana y que se agotó en el mismo momento en que Fernández lo puso en marcha.