Loan, en manos de una banda de mentirosos

José Luis Ferrari

Abogado Penalista - @drjlferrari

El marino, uno de los principales acusados del caso y marido de la funcionaria municipal, ambos presos con prisión preventiva, habló en indagatoria y apuntó directamente contra la familia del nene desaparecido. “Esto fue una venganza. Hay una interna familiar muy pesada”, así se pronunció.  También señaló que tanto él como su esposa son inocentes y aseguró que “no descarta” que opere en el caso una “verdadera organización nacional dedicada a secuestrar para trata”. También dijo quién cree que es el mayor sospechoso: “Tengo sospechas de alguien. Me llamó la atención verlo volver a Benítez, sin remera, transpirado, corriendo. Lo vi deambular, perdido sin hablar con nadie. A él y a Ramírez, ellos son amigos. Creo que le robaron todo en la policía, tengo sospechas de este señor, por su actitud por su comportamiento, me dio la sensación de una persona que no está en su normalidad. Benítez sería una de las “personas involucradas” en “las cuestiones familiares con Catalina”.

Pérez comenzó su declaración contando cómo llegó al almuerzo del 13 de junio: “Mi esposa había recibido una invitación para concurrir a la casa de Catalina Peña para degustar un almuerzo por el día de San Antonio. Yo a las únicas que conocía era a Catalina y Laudelina. A las 12:30 se coloca la mesa, Loan queda al lado de su padre”, aseguró- “A la hora más o menos 13:30 aproximadamente finalizó el almuerzo, Laudelina, y las señoras comienzan a lavar los platos. En un momento quedamos Catalina, mi esposa, José (el papa de Loan) y yo. El resto pasa para el fondo de la casa con la idea de juntar unas mandarinas, y luego salen como para el frente de la casa”, continuó.

Con respecto a su decisión de irse para ver el partido River, justo en el momento en que Loan desapareció, explicó: “Tenía pactado con mi esposa estar a las 3 de la tarde a mi casa para poder ver el partido. Aproximadamente dos y cuarto de la tarde me agarró el apuro para salir. Quedamos solos con José en la mesa, y los demás se fueron a buscar mandarinas, y enseguida vuelven y después nos dirigimos a la camioneta, y nos despedimos. En ese momento nos despedimos de Laudelina, y dice que va al encuentro de una criatura”. “Mi esposa me comenta que la tía iba al encuentro de una criatura que estaba regresando y no había llegado. Nosotros no teníamos conocimiento que se había perdido una criatura. Pensamos que la tía lo iba a buscar”, agregó. Cuando llegaron a ver el partido, la luz estaba cortada. Luego detalló por qué decidieron irse a Corrientes capital al día siguiente de la desaparición: “Nosotros teníamos un compromiso de estar en Corrientes al día siguiente, y buscar a mi hija. Mi esposa me refiere que había hablado con el comisario que le comentó y que si era necesario volvíamos, y ella me comenta que la policía le da permiso para hacer los trámites que tuviera que hacer”.  Sobre la hipótesis que plantó Laudelina en el expediente, aseguró, tajante: “El tema del atropellamiento es imposible, todos nos vieron andábamos a paso de hombre”. 

Como podemos percibir, la vida de Loan, no le interesa a nadie, el gobernador denunció una operación política en su contra, nada más alejado de la realidad, porque quien mandó al Senador Diego Pellegrini, que fue citado a declarar, y es muy cercano al mandatario provincial, y que tiene larga militancia en la Unión Cívica Radical (UCR), con cincuenta mil pesos y su abogado de confianza, para que Laudelina denuncie, algo que no pasó. Estoy seguro si hubiera sido un gobernador peronista de seguro la intervención federal a la provincia  sería casi un hecho, con lo cual le envío este mensaje al madamas provincial: Usted es el responsable del encubrimiento institucional que rodea a este caso, si es una persona de bien, renuncie. Y permita encontrar a Loan…