Lo que nadie mira de Egipto: en pleno conflicto, temen por la pérdida de patrimonio histórico
Cientos de monumentos y piezas arqueológicas fueron destruidos. Se agranda el riesgo que corren los lugares invaluables del país.
En medio del caos, y más allá de las irreversibles pérdidas humanas, los especialistas temen por la pérdida de monumentos, piezas arqueológicas en lugares declarados patrimonio de la Humanidad.
Los incidentes provocaron la destrucción de iglesias, mezquitas históricas y el saqueo del Museo Nacional Malawi en la ciudad de Menia, en el sur, como así también varios monumentos de importancia religiosa en Fayoum y la capital, El Cairo.
Según confirmaron fuentes del Museo Malawi al portal Afrol.com, islamistas seguidores del depuesto presidente saquearon prácticamente la totalidad de piezas de su colección, además de destrozar completamente aquellas piezas de mayor tamaño que no podían llevarse. En total, unas 1045 piezas fueron robadas del museo y sólo 42 pudieron salvarse.
Por precaución, el pasado 14 de agosto, Egipto cerró todos sus sitios arqueológicos y museos, así como los locales administrativos del Ministerio. Además, el ministro egipcio de Antigüedades, Mohamed Ibrahim, estableció una de operación de emergencia para dar seguimiento a las medidas de seguridad tomadas.
En este marco, la Organización de Naciones Unidas para la Educación y la Cultura (UNESCO), expresó su profunda preocupación por el patrimonio cultural de Egipto e instó a las autoridades egipcias a que garanticen la protección y la integridad de los museos, sitios y edificios históricos.
El conflicto, afectó además las pirámides y el Mar Rojo, dos de los mayores atractivos turísticos de Egipto y uno de los destinos preferidos por los visitantes provenientes de Europa.
En Giza, donde se encuentran las majestuosas pirámides, en el último mes la presencia de los turistas se derrumbó en un 50%. El conflicto también afectó la ciudad de Alejandría, donde según un empleado de una empresa petrolera italiana, Stefano Evangelista, muchos turistas se tuvieron que encerrar en sus hoteles: "La ciudad tiene hoy un aspecto espectral. Mucha gente no se ha movido de sus casas", informó.