Lo que hay que aprender de una España en crisis
*Por José Luis Garayoa Salinas. Ambos partidos –el Psoe y el Partido Popular– han sido incapaces de revertir la crisis que produjo millones de desocupados
Felicitaciones a Esteban Dómina por su nota del pasado domingo. Supo captar la protesta generalizada de "los indignados españoles" no sólo en la Puerta del Sol –por la cual he tenido la oportunidad de transitar estos días–, sino también en el resto de las grandes ciudades de España. Es correcto el análisis político de una realidad que ha golpeado a esta economía del bienestar.
Ambos partidos –el Psoe y el Partido Popular– han sido incapaces de revertir la crisis que produjo millones de desocupados. El gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero no supo aplicar a tiempo políticas para tener una "economía diversificada" y no previó este descalabro ocurrido con el endeudamiento de los particulares y por el despilfarro de los recursos públicos.
Los bancos y cajas concedieron créditos sin tener en cuenta la solvencia de quienes los solicitaban, pues a los empleados se les otorgaban créditos para adquirir una vivienda o cambiar de automóvil cada año. Es decir, la deuda privada y pública (de las comunidades) es ahora un dolor de cabeza para quienes están desocupados y para los bancos que pretenden cobrar las hipotecas. En las economías, tanto de las familias como del Estado, no se puede gastar más de lo que ingresa. Claro que se puede hacer comparaciones con el descreimiento que los argentinos, y cordobeses en particular, tenemos de los políticos que no están a la altura de las circunstancias y viven en el "limbo" sobre las necesidades y aspiraciones de quienes desean vivir con justicia social y con los postulados de derechos y garantías que se declaman.
De corrupción y malversación de fondos, ni hablemos. Tampoco de emergencias previsionales como la de la Caja de Jubilaciones de Córdoba y de un déficit provocado por pésimas administraciones; total, el Tribunal Superior de Justicia avala las leyes que la Unicameral dicta entre "gallos y medianoche".
La deuda provincial, ¿a cuánto asciende? Dómina no habló de esto en su nota. ¿Quizá por prurito partidista?