Le sacó el auto a su padre, atropelló a dos jóvenes y los abandonó
Las víctimas circulaban en moto por el barrio San Martín, de Capital. Cuando el adolescente los arrolló y huyó, se le cayó la patente al coche y así lo detectaron. Uno de los jóvenes está muy grave.
Dos jóvenes que circulaban en moto por el barrio San Martín, en Mendoza, fueron atropellados por un automovilista que no les prestó ayuda y escapó. Pero lograron dar con el conductor porque se le cayó la patente del vehículo. Uno de los que iba en el rodado menor está grave, en terapia intensiva.
El choque se produjo en calle Maipú frente a la manzana 37. Alrededor de las 14 de ayer, el chico al mando de un Fiat Duna de color negro atropelló a Alberto Suchetti (18) y a Jonathan Guiñay (23) que circulaban en una Zanella de 110 centímetros cúbicos.
El adolescente se alejó a toda velocidad del lugar del accidente. Los vecinos llamaron al 911 y arribaron al lugar efectivos de la Comisaría Nº 33 y dos ambulancias del SEC que trasladaron a los heridos al Hospital Central.
Suchetti sufrió politraumatismos graves y debió ser intervenido quirúrgicamente, quedando internado en terapia intensiva. Su amigo, aunque posee el mismo diagnóstico se encuentra en observación porque sus lesiones son de menor gravedad.
Mientras los lesionados eran llevados al hospital, los policías encontraron en el lugar del accidente la patente del auto que había embestido a los jóvenes. Se comunicaron al 911 y pidieron información sobre a quién le pertenecía el vehículo.
Desde el CEO les respondieron que se trataba de un Fiat Duna a nombre un hombre, de apellido Aguilar, que reside en una casa del mismo barrio. Los uniformados se trasladaron a ese domicilio.
Los efectivos llegaron a la vivienda indicada y observaron el coche. Salió el propietario y confirmó que esa patente encontrada le correspondía a su auto, cuando los efectivos le contaron que lo buscaban por un accidente.
Entonces el hombre le dijo que había sido su hijo, quien le había sacado el vehículo sin autorización.
Esto derivó en que se iniciara un expediente judicial caratulado como lesiones graves culposas en la Oficina Fiscal Nº 2, de Capital.