Las fotos que presentó la defensa de Alberto Fernández para probar unas supuestas adicciones de Fabiola Yañez
La “Testigo B” presentó un escrito con su declaración en el que incluyó imágenes, hasta ahora desconocidas, de la ex primera dama con bebidas alcohólicas.
En el marco de la investigación por la denuncia de Fabiola Yañez contra Alberto Fernández por violencia de género, la defensa adoptó una nueva estrategia: desacreditar a la ex primera dama.
Este martes, la “Testigo B” presentó un escrito con su declaración en el que incluyó fotos con las que intentan mostrar que la ex primera dama atravesaba problemas de “alcoholismo y desequilibrio emocional”.
La mujer aportó tres imágenes. En una se la ve a Fabiola en la Quinta de Olivos, sosteniendo una botella de champagne.
En otra, aparece una hielera y de fondo está la ex primera dama, fumando un cigarrillo.
En la última, Yañez está preparando un trago. Tiene puesto un vestido rojo y delante de ella, una copa con hielo, unas botellas de alcohol y otra de jugo de naranja.
El testimonio de la Testigo B: “Dos copas cambiaban rotundamente su estado emocional”
La testigo describió cambios abruptos en el comportamiento de Yañez tras consumir alcohol: “Lo que más llamaba la atención es que dos copas cambiaban rotundamente su estado emocional”, afirmó.
La declaración fue presentada ante un escribano y entregada en un sobre cerrado en la fiscalía de Ramiro González, encargado de la causa.
Según fuentes cercanas a la investigación, este testimonio busca respaldar la versión de la defensa de que las acusaciones de violencia de género carecen de fundamento y están relacionadas con episodios de inestabilidad emocional presuntamente causados por el alcohol.
El relato de la testigo incluyó detalles sobre los presuntos esfuerzos del personal de la residencia presidencial para ocultar el estado de Yañez.
“Cuando escuchábamos el helicóptero (presidencial), le poníamos spray en la boca, tirábamos Poett y tratábamos de disimular los olores”, sostuvo.
Además, mencionó que Teresa, otra de las empleadas, era quien más la asistía cuando Yañez sufría caídas o episodios de desmayo, presuntamente relacionados con su consumo de alcohol.
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