Las ciudades más contaminadas del mundo
Según un informe publicado en “The Huffington Pos” hay ciudades tan contaminadas que vivir un día en ellas equivaldría a fumarse tres paquetes de cigarrillos.
En Europa, las muertes por contaminación son 50 mil al año, tan sólo en la ciudad de Londres. En Estados Unidos, la ciudad de Los Ángeles es una de las más sucias y, más aún, en el área metropolitana de Phoenix.
En cuanto a desastres petrolíferos, la parte más contaminada equivale al Delta del Níger, en Nigeria. Que es la región en la que yacen multinacionales como Shell o British Petroleum. Allí, se calcula que en sus aguas se han derramado unos trece millones de barriles de crudo en el último medio siglo.
En cuanto a Indonesia, Citarium tiene el río más contaminado del mundo. La Oroya, en Perú, padece los vertidos de la fábrica Doe Ron, que vomita cientos de miles de kilos de dióxido de azufre, plomo y arsénico en el medio ambiente. Respecto a Rusia, es el país con más natalidad que mortalidad y la cuna de los desastres ecológicos.
Dzerzhinsk fue durante la Guerra Fría una población fabricante de armas químicas, cuya eficacia machacó a sus habitantes mucho más que al enemigo. Se calcula que hay 300 mil personas afectadas. Norilsk, como "la peor ciudad del mundo para vivir".
Se trata de otra urbe rusa, con 230.000 habitantes, situada en el centro de la temida Siberia. Entre sus numerosas desventajas, se destaca la esperanza de vida, que se limita a 44 años. Esta ciudad, además, tiene una exacerbada cantidad de árboles talados al año.
En cuanto a desastres petrolíferos, la parte más contaminada equivale al Delta del Níger, en Nigeria. Que es la región en la que yacen multinacionales como Shell o British Petroleum. Allí, se calcula que en sus aguas se han derramado unos trece millones de barriles de crudo en el último medio siglo.
En cuanto a Indonesia, Citarium tiene el río más contaminado del mundo. La Oroya, en Perú, padece los vertidos de la fábrica Doe Ron, que vomita cientos de miles de kilos de dióxido de azufre, plomo y arsénico en el medio ambiente. Respecto a Rusia, es el país con más natalidad que mortalidad y la cuna de los desastres ecológicos.
Dzerzhinsk fue durante la Guerra Fría una población fabricante de armas químicas, cuya eficacia machacó a sus habitantes mucho más que al enemigo. Se calcula que hay 300 mil personas afectadas. Norilsk, como "la peor ciudad del mundo para vivir".
Se trata de otra urbe rusa, con 230.000 habitantes, situada en el centro de la temida Siberia. Entre sus numerosas desventajas, se destaca la esperanza de vida, que se limita a 44 años. Esta ciudad, además, tiene una exacerbada cantidad de árboles talados al año.