Lanzan un teclado para Facebook
Si sólo uno de cada diez mil de los usuarios registrados en Facebook en todo el mundo comprara un producto, ese producto tendría asegurada la venta de 60.000 unidades.
Si sólo uno de cada diez mil de los usuarios registrados en Facebook en todo el mundo comprara un producto, ese producto tendría asegurada la venta de 60.000 unidades. Un volumen nada despreciable. Es bastante posible que estos números hayan rondado en la cabeza del empresario Robert Amato, fundador y gerente general de la firma Social Keyboards, cuando decidió poner en el mercado un teclado de computadora especialmente diseñado para usuarios de esa red social.
El dispositivo cuenta con todos los comandos estándares de los teclados de computadora convencionales, pero suma, en los extremos laterales, sendas tiras de botones que sirven para realizar, con un solo toque, diferentes operaciones en Facebook.
El teclado se llama SNAK (por la sigla en inglés de Teclado de Acceso a la Red Social). En él, las once teclas pensadas para la mano izquierda del usuario dan acceso rápido, por ejemplo, a la página principal de Facebook, a los mensajes y notificaciones que se hayan recibido, al área de edición del propio perfil, a la lista de amigos y a las de sus números telefónicos.
A su vez, con algunos de los ocho comandos especiales para la mano derecha, los usuarios de Facebook podrán acceder desde el SNAK a sus fotos, a los links subidos a la red social por ellos o por sus amigos, o al sector desde donde se suben videos a la red social.
Por lo demás, el teclado SNAK se conecta a las computadoras mediante el ya clásico puerto USB, viene preparado para funcionar con Windows XP, Vista y con el más reciente Windows 7, e incluye un soporte de descanso para las muñecas que, si se prefiere, se puede desmontar.
Para tenerlo, hay que pagar por él, en los Estados Unidos, 30 dólares más gastos de envío. Desde el resto del mundo se lo puede comprar en el sitio web del fabricante con un costo adicional fijo por el envío de veinte dólares, sin importar el punto del planeta en que se lo quiera recibir.