Lagomarsino: "Nisman me dijo que no iba a usar el arma"
El imputado en la causa Nisman habla por primera vez. El lugar que eligió el imputado en la causa que investiga la muerte del fiscal es el estudio de su abogado.
"Mi silencio fue a pedido de la fiscal (Fein). Entiéndanme que no estoy bien, más allá de estar metido en ésta situación, se fue una persona con la que trabajé mucho tiempo", fueron las primeras palabras de Lagomarsino.
"El sábado estoy en mi casa, me aparece una llamada privada que no escucho, 4:25, 4:26. Vuelve a sonar, atiendo, era Alberto Nisman diciéndome 'por favor, ¿podés venir?'. No era infrecuente que lo haga. Me cambié y llegué en unos 20 minutos. Me identifico en el portón hacia el este, cerca del rio y subo. Entro por la puerta de servicio, subo y Nisman me hace pasar. Paso por la cocina y el living, sobre cuya mesa había mucha documentación, algo normal. Me llamó la atención que había cuatro resaltadores amarillos. Yo usé cuatro en toda mi carrera, me llamó la atención por la forma que era él".
En conferencia de prensa, Lagomarsino relató cómo fue la última conversación que mantuvo con Nisman: "Me decía 'tengo más miedo de tener razón que de no tenerla. En ese momento me dice '¿tenés un arma?'. Me dejó completamente mal parado, no entendía nada, imagínense que están con su jefe y les pregunta eso... mi reacción fue no creer que me preguntaba eso. Lamentablemente le dije que sí, pero le pregunté '¿para qué la querés?' y me dijo 'tengo miedo por las chicas, en realidad'. Le dije 'pero Alberto vos tenés seguridad', y me respondió 'Pero ya no confío ni siquiera en la custodia', se quiebra y dice '¿vos sabés lo que es que tus hijas no quieran estar con vos por miedo a que les pase algo?'.
Lagomarsino señaló que, al prestarle el arma y preguntarle si sabía usarla, Nisman le aclaró: "No te preocupes, que no la voy a usar".
Sin embargo, Lagomarsino contó que Nisman "iba a guardar el arma en la caja de seguridad y después la iba a guardar en la guantera del auto al día siguiente cuando estuviera con las chicas", en referencia a sus hijas, las cuales se encontraban de viaje en Europa junto a su madre, la jueza Sandra Arroyo Salgado.
Aunque sólo declaró como testigo y no fue citado a indagatoria, Lagomarsino se encuentra imputado del delito de entregar un arma a quien no es legítimo usuario, castigado con penas de uno a seis años de cárcel. La conferencia de prensa se realizó en el estudio de su abogado, Maximiliano Rusconi, el mismo que representó a Carlos Menem en la causa de la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia.