La vida de lujo del narco colombiano: tenía 5 residencias y 10 custodios
Henry de Jesús López Londoño, alias "Mi Sangre", había ingresado al país junto a su familia con un pasaporte venezolano falso. Vivía en Nordelta y en campos y countries de la zona Norte.
El jefe narco Henry de Jesús López Londoño, alias "Mi Sangre", detenido ayer en Pilar era "el mayor proveedor de cocaína" del cartel mexicano de Los Zetas, afirmó hoy el director de la Policía Nacional de Colombia.
El narcotraficante había ingresado a la Argentina junto a su esposa y su hijo a fines de 2011, con pasaportes falsos. Estaba constantemente custodiado por al menos diez personas de seguridad y tenía cinco casas: una en Nordelta, y tres campos y countries en la zona norte de la provincia de Buenos Aires.
En conferencia de prensa, el general José Roberto León dijo que "Carlos Mario", el otro apodo con el que se le conoce, se vio obligado a salir de su país por la presión de las fuerzas de seguridad hace unos dos años y desde entonces se lo buscó en varias ciudades de la región hasta que se instaló en el Gran Buenos Aires.
Según la agencia EFE, el jefe policial dijo que a López Londoño se lo buscó en Ecuador, Venezuela, Uruguay, Paraguay, Brasil, Panamá, Argentina y México y que hubo dos operaciones previas a las de hoy para detenerlo.
Una fue en Argentina y logró escapar, y la otra en Paraguay, pero fue abortada al coincidir con el golpe de Estado contra el ex presidente Fernando Lugo, en junio pasado.
"Hace dos meses regresó a Buenos Aires y lo ubicamos", subrayó el general colombiano, quien señaló que "Mi Sangre" fue localizado gracias a informes de los servicios de inteligencia y con la ayuda de las autoridades argentinas y la DEA (Policía Antinarcóticos) de Estados Unidos.
La búsqueda implicó el despliegue de "tecnologías de control técnico para saber todos sus movimientos" y de "tecnología satelital en coordinación con las autoridades argentinas", explicó León. Los satélites se usaron para conocer los desplazamientos que "Mi Sangre" hacía en "carros de alta gama", indicó el jefe policial.
León agregó que López Londoño vivía en las afueras de Buenos Aires con su esposa y dos hijos, se hacía pasar por "empresario venezolano" y llegó a habitar hasta seis domicilios. Al parecer, agregó, el colombiano estaba gestionando documentos en la embajada de Ecuador en Buenos Aires.
Con una trayectoria delictiva que se remonta a los años `90, "Mi Sangre" era uno de los cabecillas de "Los Urabeños", grupo de origen paramilitar del que era "financiador", agregó el jefe policial. Además, controlaba lo que quedaba de la llamada Oficina de Envigado, cuya base está en la localidad cercana a Medellín que tiene ese nombre y que se dedica a blanquear dinero del narcotráfico, a la extorsión y al sicariato.
La Oficina de Envigado fue creada por Pablo Escobar Gaviria, jefe del desaparecido cártel de Medellín, y tras la muerte de éste pasó a manos de "Don Berna", alias del narcotraficante y paramilitar Diego Fernando Murillo.
"Don Berna" fue extraditado a Estados Unidos en 2008 junto a otros doce ex jefes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), organización paramilitar cuya disolución en 2006 dio origen a bandas de narcotraficantes como la de "Los Urabeños".
Una serie de "alianzas con narcotraficantes y temibles delincuentes le permitió a López conocer la geografía colombiana y las distintas redes del narcotráfico", apuntó el director policial.
El narcotraficante había ingresado a la Argentina junto a su esposa y su hijo a fines de 2011, con pasaportes falsos. Estaba constantemente custodiado por al menos diez personas de seguridad y tenía cinco casas: una en Nordelta, y tres campos y countries en la zona norte de la provincia de Buenos Aires.
En conferencia de prensa, el general José Roberto León dijo que "Carlos Mario", el otro apodo con el que se le conoce, se vio obligado a salir de su país por la presión de las fuerzas de seguridad hace unos dos años y desde entonces se lo buscó en varias ciudades de la región hasta que se instaló en el Gran Buenos Aires.
Según la agencia EFE, el jefe policial dijo que a López Londoño se lo buscó en Ecuador, Venezuela, Uruguay, Paraguay, Brasil, Panamá, Argentina y México y que hubo dos operaciones previas a las de hoy para detenerlo.
Una fue en Argentina y logró escapar, y la otra en Paraguay, pero fue abortada al coincidir con el golpe de Estado contra el ex presidente Fernando Lugo, en junio pasado.
"Hace dos meses regresó a Buenos Aires y lo ubicamos", subrayó el general colombiano, quien señaló que "Mi Sangre" fue localizado gracias a informes de los servicios de inteligencia y con la ayuda de las autoridades argentinas y la DEA (Policía Antinarcóticos) de Estados Unidos.
La búsqueda implicó el despliegue de "tecnologías de control técnico para saber todos sus movimientos" y de "tecnología satelital en coordinación con las autoridades argentinas", explicó León. Los satélites se usaron para conocer los desplazamientos que "Mi Sangre" hacía en "carros de alta gama", indicó el jefe policial.
León agregó que López Londoño vivía en las afueras de Buenos Aires con su esposa y dos hijos, se hacía pasar por "empresario venezolano" y llegó a habitar hasta seis domicilios. Al parecer, agregó, el colombiano estaba gestionando documentos en la embajada de Ecuador en Buenos Aires.
Con una trayectoria delictiva que se remonta a los años `90, "Mi Sangre" era uno de los cabecillas de "Los Urabeños", grupo de origen paramilitar del que era "financiador", agregó el jefe policial. Además, controlaba lo que quedaba de la llamada Oficina de Envigado, cuya base está en la localidad cercana a Medellín que tiene ese nombre y que se dedica a blanquear dinero del narcotráfico, a la extorsión y al sicariato.
La Oficina de Envigado fue creada por Pablo Escobar Gaviria, jefe del desaparecido cártel de Medellín, y tras la muerte de éste pasó a manos de "Don Berna", alias del narcotraficante y paramilitar Diego Fernando Murillo.
"Don Berna" fue extraditado a Estados Unidos en 2008 junto a otros doce ex jefes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), organización paramilitar cuya disolución en 2006 dio origen a bandas de narcotraficantes como la de "Los Urabeños".
Una serie de "alianzas con narcotraficantes y temibles delincuentes le permitió a López conocer la geografía colombiana y las distintas redes del narcotráfico", apuntó el director policial.