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La TV ataca

*Por Leandro Zanoni. Con el desembarco en nuestro país del poderoso Netflix, el servicio estadounidense de suscripción a películas y series por Internet más grande del mundo, la competencia por el tiempo y el dinero del usuario para ver películas y series en la computadora y la TV, se torna más interesante.

Decíamos en abril en esta columna que una de las tendencias más fuertes del último año en cuanto al comportamiento online de los usuarios es la de trasladar la web al televisor. El crecimiento de las pantallas LCD (Liquid Cristal Display), por un lado, y el aumento de la banda ancha, por el otro, hicieron posible navegar por nuestros sitios favoritos, ver videos de YouTube, películas, series y recitales, las fotos de nuestros amigos en Facebook, instalar aplicaciones como las que instalamos en el celular, hablar y ver a un familiar por Skype y comentar el partido de Boca con nuestros seguidores de Twitter. Y todo eso desde el sillón del living. Las TV con Wi-Fi fueron las estrellas de la feria tecnológica Consumer Electronic Show (CES) de Las Vegas, en enero último. Bajo el concepto Smart TV, estos televisores inteligentes ya se venden en nuestro país de la mano de Sony, LG y Samsung.

Con más de 25 millones de usuarios suscriptos en USA y Canadá, Netflix revolucionó la manera de ver cine y TV en el hogar. El servicio es simple: por $39 por mes (sólo con tarjeta de crédito) y con una computadora con conexión de banda ancha, se podrán ver películas y series al instante y online (es decir, en streaming, sin bajar los videos). Su CEO Reed Hastings fue el encargado de presentar el servicio ante la prensa en un lujoso hotel de Recoleta. Allí dijo, cauteloso, que Netflix no venía a sacarle público a la TV abierta ni al cable. Ellos tienen más ofertas y opciones.

Nosotros somos una opción más, un canal muy económico para el usuario. Las películas estarán online aproximadamente un año y medio después de estrenadas en el cine.

Los jugadores se ven en la cancha. Netflix, Telefónica y MovieCity ya lanzaron en nuestro país sus servicios para ofrecer contenidos desde la Web para ser vistos desde la TV y/o una computadora. Y también Cablevisión hará lo propio antes de fin de año.

Telefónica lanzó hace cuatro meses OnVideo, sólo para clientes de su banda ancha Speedy y a un costo de $40 mensuales. MovieCity ya tiene el sitio Play, para que los usuarios abonados a sus once señales Premium puedan acceder a una carta online de unos 400 títulos, entre películas, series y documentales. La clave está en los contenidos. Quién tenga el mejor catálogo para ofrecer será el ganador, explica Juan Sola, vicepresidente de marketing de MovieCity. Netflix apostará, también, a producir sus propios contenidos. Para el año que viene tiene previsto hacer una serie con el actor Kevin Spacey.

Por su parta, también YouTube (de Google) ya transmite programas en vivo y sumará a su oferta otros 20 canales con contenidos Premium gratuitos, cuya producción le demandaría una inversión de 100 millones de dólares.

La competencia es bienvenida si la pelea es de igual a igual, aclara Sola y traza un límite entre sitios con contenidos legales y los otros, como Cuevana. El sitio de streaming gratuito de películas y series es furor entre los usuarios locales y latinos fue fundado por tres chicos argentinos y planea dar batalla legal mediante acuerdos con las productoras locales más chicas e independientes. ¿Podrá competir con los colosos? Es Difícil, pero no imposible. El tiempo tendrá la respuesta. Mientras tanto, ellos se preparan y dan pelea. En pocas semanas saldrán a la cancha con un sitio renovado y con más herramientas sociales, con mejoras en la usabilidad y en el funcionamiento de sus servidores.

A principios de este año, un empresario de la industria del cable me dijo: Sino vamos con nuestros contenidos a cada una de las pantallas de nuestros clientes, no seremos parte de la TV del futuro. El sector parece haber tomado conciencia y aprendido la lección de lo que les pasó a las discográficas con la piratería. El contexto tecnológico es otro y más favorable: internet más madura, con más usuarios conectados, más banda ancha y redes sociales. La oportunidad está en sus manos.