La trama de encubrimiento del supuesto asesino de Marisol Oyhanart
A 8 meses de su asesinato, el único sospechoso habría pagado para hacer desaparecer las pruebas en su contra, según consta en el expediente.
Ya pasaron 8 meses del asesinato de Marisol Oyhanart, la maestra jardinera que había salido a caminar el 14 de abril y apareció muerta al día siguiente.
El largo trabajo de los investigadores arrojó un solo sospechoso: un empresario de la zona de Saladillo, que habría pagado para hacer desaparecer las evidencias que lo incriminaban.
Como si fuera poco, en el expediente aparecieron conversaciones de Facebook en las cuales un testigo del crimen lo acusa de haber depositado una importante suma de dinero para que lo encubrieran.
Ese proceso de protección incluye la eliminación de las calzas y las zapatillas que usaba la víctima, y las declaraciones de dos exparejas de este empresario, que lo acusaron de maltrato y violencia.