La sorpresa de Sandra Arroyo Salgado por el arma de Nisman: "Esto cambia todo"
La ex mujer del fiscal habló después de que se conociera que Sara Garfunkel tenía un arma y todas las miradas apuntan hacía el técnico informático.
La noticia cayó como una bomba: Alberto Nisman tenía un arma en la casa de su madre y todo se revolucionó. La jueza y ex mujer del fiscal Sandra Arroyo Salgado se mostró sorprendida por la revelación y aseguró: "Para mí esto cambia todo, cambia el escenario".
"Yo me enteré de esto ayer por el defensor que nos patrocina en la querella. Nunca Nisman tuvo armas en nuestro domicilio", afirmó Arroyo Salgado en diálogo con radio Vorterix. La pareja convivió hasta octubre de 2011. Durante sus años de relación, compartieron primero un departamento de ella, luego una casa en el country Highland Park y finalmente dos departamentos distintos en el centro.
Madre de dos hijas que tuvo con el ex fiscal de la causa especial AMIA, la jueza de San Isidro siempre sostuvo que Nisman fue asesinado y recusó -sin suerte- a la fiscal del caso, Viviana Fein, por supuestamente sólo investigar la hipótesis de un suicidio. "Quiero ser prudente con la investigación de la fiscal y la jueza [Fabiana Palmaghini]", dijo hoy Arroyo Salgado.
Sin embargo, dijo que tener "la certeza de que esto [la muerte de Nisman] se trató de un homicidio", según la información que recogieron los peritos que ella designó como querellante en la causa.
Sara Garfunkel informó ayer a la Justicia que su hijo había dejado un arma guardada en su casa sin que ella lo supiera. Declaró ante la fiscal Fein que la encontró hace once días, en la baulera de su departamento de la calle Roosevelt, donde Nisman la había acomodado entre una pila de objetos personales que llevó allí durante unos pocos meses que vivió con ella. El fiscal se alojó una temporada en lo de su madre después de que se separó de Sandra Arroyo Salgado, hace más de tres años.
Garfunkel, que ayer declaró como testigo, dijo que no sabía de la existencia de esa arma y que se enteró el 3 de abril pasado, cuando bajó a su baulera para hacer lugar, porque -según relató- había decidido ubicar allí las ocho cajas con bienes de su hijo que le habían hecho llegar de la UFI AMIA.
"Desconocía que Alberto tenía armas registradas a su nombre. No sé cuándo la adquirió y nunca las tuvimos en nuestra casa, y tengo la certeza de las cosas que tenía en nuestro domicilio", resaltó Arroyo Salgado.
¿Por qué Nisman pidió un arma prestada si tenía una propia? Tanto Diego Lagomarsino, dueño de la pistola con la que el fiscal apareció muerto, como el custodio Rubén Benítez dijeron que el sábado previo a su muerte Nisman les había dicho que quería un arma. Según sus declaraciones, a Benítez le pidió asesoramiento para comprarse una esa semana. A Lagomarsino le pidió prestada la suya.
No se sabe todavía en qué condiciones estaba el arma secuestrada ayer en la baulera. Tampoco, si tenía proyectiles. Garfunkel dijo que la encontró el viernes de Semana Santa, enfundada en una tela y dentro de una bolsa de nylon negra.
Hace más de diez años, en los 90, Nisman había declarado dos armas: una pistola semiautomática Bersa calibre 22 y un revólver Rossi calibre 38. En 2009 transfirió el revólver. De la pistola nada más se supo. Sólo que no la encontraron en su departamento. Aparentemente esa arma, del mismo modelo que la de Lagomarsino, es la que la División Homicidios de la Policía Federal secuestró en la baulera.