La Plata: salieron a quemar coches y casas
Temor en La Plata por una banda que ha provocado muchos daños. Una mujer resultó herida.
La ola de ataques a autos, de una banda de "quemacoches" que actúa en La Plata, no se detiene. Es más, en las últimas horas, además de incendiar vehículos, también prendieron fuego tres casas.
Según publicó el diario El Día de La Plata, los delincuentes empezaron en la puerta de una casa de 62 entre 151 y 152. Allí fueron primero a quemar un Volkswagen Senda, que estaba estacionado sobre la vereda. Era poco más de la medianoche. Un testigo pasó por allí, detectó el siniestro y le avisó al dueño, que alcanzó a apagar el fuego por sus propios medios. "Me quedé afuera dando vueltas a ver si veía a alguien, pero no", señaló el dueño de ese vehículo.
Dos horas más tarde, una situación idéntica. En este caso, el mismo damnificado volvió a salir a la calle con una manguera y un matafuegos para extinguir las llamas, que derretían todo el interior y la carrocería de su otro auto, un Peugeot 504. El hombre sólo consiguió "de casualidad" que no explotara el tanque de combustible, porque el vehículo quedó arruinado. Cuando parecía que la locura había terminado, llegó lo peor.
A media cuadra de esos ataques, en 62 y 152, la dueña de una casa escuchó un ruido fuerte desde su cuarto y se quedó encerrada allí porque "creyó que le habían entrado a robar", explicó un familiar. Pero la víctima, una pensionada de 55 años que vive sola, tardó unos minutos en reaccionar hasta que empezó a sentir olor a quemado. Bajó a la planta baja y en el medio de la desesperación atravesó las lenguas de fuego que se esparcían por todo el frente de su domicilio. En la huida, la mujer sufrió quemaduras en las manos y en un brazo hasta el hombro, según informó el matutino El Día.
Los primeros en auxiliarla fueron varios vecinos, que ofrecieron su ayuda improvisada con baldes de agua, viendo que "los bomberos tardaron casi una hora", según se quejaron en el barrio. Ayer a la tarde los rescatistas tuvieron que volver, porque seguía saliendo humo. Fue muy poco lo que se logró con la solidaridad: la vivienda acabó con daños totales, el techo y las paredes quedaron renegridos y se perdieron varios muebles y electrodomésticos. La dueña terminó internada en un centro médico de la zona.