La palabra del martillero público que vendió la camioneta de Leo Fariña: "Armaron un circo y me quedé sin laburo"

DiarioVeloz se comunicó con Fronza, quien hasta el momento no había dado declaraciones, para esclarecer la situación. El hombre contó que el auto está valuado entre $850 mil y $980 mil pesos y que Limeres la compró en $644 mil. Sin embargo, tuvo que pagar comisiones, aportes y otros gastos que hicieron llegar el precio a los $721 mil pesos. Pero eso no es todo, según Fronza, el vehículo se encuentra en muy malas condiciones (faros rotos, choques traseros y laterales, varios daños, etcétera), por lo que el valor total del bien será mucho más elevado.

"¿Te parece que con todo esto el hombre hizo un brillante negocio? Para mí yo lo vendí re bien", explicó Fronza, desterrando la posibilidad de que haya ayudado al hombre a adquirir el vehículo.  "Yo no lo conocía, lo vi por primera vez en la exhibición de seis días del auto al que tuve que ir", agregó.

Respecto a la salida del lugar, que la hicieron ambos en el auto personal de Fronza, explicó que es una medida que siempre se toma en estas situaciones, priorizando la seguridad del comprador, quien tiene mucho dinero en efectivo. Deben trasladarse juntos para completar datos personales.

 "En el asiento de adelante estaba el agente fiscal que lleva adelante la causa y yo. Atrás va el guardia que me provee la Policía Federal para acompañarnos con la plata. Y al lado el comprador", explicó.

El martillero, quien salió a hablar porque le están "pegando por todos lados", indicó que la compra fue realizada en términos normales y que no es su responsabilidad verificar su situación fiscal: "Yo le saqué la mayor suma de dinero que pude y nadie más en la sala hizo otra oferta. Esta persona luego subió y habló con la secretaria del juzgado que estaba en el lugar. Ella verifica que tiene el dinero en el maletín y ella -no yo- sale al estrado y dice 'se ha concluido el acto, el comprador ha demostrado tener los medios económicos y jurídicos para contratar'. Todo lo demás es circo".

Respecto a la situación fiscal del hombre, dijo: "Nadie tiene que hacer nada porque no hay órdenes al respecto. La AFIP se entera que es monotributista cuando conoce la identidad del comprador. El juez nunca dice que el hombre debe tener CUIT vigente".

Fronza culpó a los medios de hacer público este "escándalo" y confesó que se quedó sin trabajo y que la gente lo "odia". Y aclaró: "La AFIP hizo lo correspondiente (al anular la compra) porque ante alguna anomalía en la condición del contribuyente en relación al bien adquirido hay que solicitar al juzgado que anule la compra".