La otra cara de los Martín Fierro: los perdedores de la entrega
Como en toda competencia los ganadores son los que se llevan los aplausos. Del otro lado están los que se van con las manos vacías y no ocultan su bronca. Conocelos.
Las miradas siempre se posan sobre los ganadores, pero como en toda competencia existen perdedores. En la entrega de los Martín Fierro no todo es felicidad, también está el desencanto y la tristeza de quienes no consiguen el premio.
Marley es uno de los perdedores. Es que el hombre que realizó la conducción en el Teatro Colón, hombre de Telefe hace años con una gran aceptación entre el público, estaba nominado en el rubro de "Conducción masculina" por su labor en Minuto para ganar, pero perdió en manos de Beto Casella.
Otra "aplauso" se merecen Verónica Lozano y Leo Montero, figuras del programa AM, quienes se fueron con las manos vacías. Ella se fue con bronca porque el Martín Fierro se lo llevó Virginia Lago. Él, también con bronca, perdió ante Casella: "Es la tercera vez que me nominan y nunca gané. Me parece que no vengo más", dijo en tono de broma.
"La verdad lo que me jode es que se lo haya llevado Virginia Lago", declaró Andrea Politti, la conductora de Los unos y los otros que fue acompañada por su hijo, otra que se marchó con gusto amargo.
Otro que se puede calificar de "perdedor" es Germán Paoloski, quien estaba ternado como "Mejor labor periodística", pero se entristeció cuando dijeron que no se lo llevaba: simuló ponerse un arma en la cabeza y dispararse.
Sol Estevanez tampoco ganó nada, pero sufrió más que no haya comida: "Me morí de hambre", declaró la hermana de Sebastián. Por otro lado, Reinaldo Sietecase, quien recibió una estatuilla por panelista, pero no por radio como él pretendía.