La nueva tecnología que permite borrar los tatuajes de manera efectiva y sin dolor
Hoy es posible deshacerse de diseños pasados de moda o que perdieron el sentido con el que se los hizo sin dejar rastros en la piel.
Hoy tatuarse dejó de ser una decisión permanente y las nuevas tecnologías con que cuenta la medicina estética ofrecen alternativas para eliminarlos de manera eficaz e indolora.
"Hoy en día ya es tan habitual hacerse un tatuaje como eliminarlo, y dentro de los principales motivos para borrarlos sin duda los profesionales son una razón. También hay causas personales, muchas veces los tatuajes realizados durante la juventud con el paso del tiempo pierden significado y aparece la necesidad de borrarlo. Es muy frecuente la demanda de eliminación de nombres, frases o fechas, así como los tatuajes que como resultado del paso del tiempo pierden su estética, su forma queda desdibujada o ya no resultan atractivos". Para la médica especialista en cirugía plástica y estética Griselda Seleme (MN 80033), "son múltiples las causas por las que las personas deciden borrarse un tatuaje, pero la consulta común en todos los casos ronda en torno a cómo es el procedimiento y si duele".
En diálogo con Infobae, la especialista destacó que al momento de tomar la decisión de borrar un tatuaje, "es importante tener una consulta médica para evaluar las posibilidades".
La nueva tecnología de picosegundos se impone como la aliada ideal si de eliminar tatuajes de manera rápida e indolora en distintos tipos de piel se trata.
"Se trata de un láser de última generación que se caracteriza principalmente por emitir pulsos de energía que tienen una duración de una trillonésima parte de segundo -puntualizó Seleme-. Este pulso tan corto produce una entrega muy alta de energía en muy poco tiempo y de esta forma, la temperatura de las partículas de la tinta aumenta de forma súbita y las hace estallar en fragmentos mucho más pequeños". Al ser partículas tan pequeñas, el organismo las elimina de manera natural a través del sistema linfático.
Entre sesión y sesión se requiere una espacialidad de entre seis y ocho semanas "para que el cuerpo pueda eliminar el pigmento".
Seleme destacó que la técnica "permite borrar los tatuajes sin que queden rastros de ellos y con el plus de no dañar la piel, cosa que hasta hoy no podía lograrse ya que generalmente se cambiaba un tatuaje por un cicatriz".
"Lo que logra la tecnología de picosegundos es romper la tinta en pequeñas moléculas de micro pigmentos, que al estar rodeados de tejido sano se cicatrizan en forma natural", señaló la especialista, quien entre otra de las ventajas de la novedosa técnica resaltó que "al transmitir la energía de manera muy rápida no genera inflamación en los pacientes y la recuperación es mucho más rápida que con otros sistemas".
El láser picosegundos penetra en la piel y realiza una activación celular, de modo que estimula la producción de colágeno y elastina. La aplicación dura entre 10 y 15 minutos y generalmente se realizan de una a tres sesiones, aunque la duración del tratamiento dependerá de la condición de la piel en cada caso particular.
Si bien el procedimiento es muy bien tolerado, algunas personas pueden sentir "pequeños pellizcos en la zona". "Nosotros utilizamos todos los recursos para asegurar el confort de los pacientes, por eso aplicamos una máscara con crema anestésica y para quienes tienen un umbral muy bajo de sensibilidad y también nos ayudamos de un equipo de enfriamiento", explicó al respecto Seleme.
Sobre los cuidados posteriores, la especialista sostuvo que "al finalizar la sesión puede producirse un mínimo enrojecimiento, que no dura más de una a tres horas, por lo que se pueden retomar las actividades normales sin requerir tiempo de recuperación". Para potenciar los resultados y cuidar la dermis, la médica recomendó, al igual que para cualquier tratamiento de mejoramiento de la piel, usar protección solar y evitar la exposición al sol.