La mentira del “Sí se puede”: la lógica matemática demuestra que Macri está en retirada

Luciano Fryszberg

Jefe de Redacción - @Luchofry

Los miembros de Cambiemos están divididos en dos grupos: los que sostienen que revertir el resultado de las PASO es prácticamente imposible y piensan en una transición ordenada hasta el 10 de diciembre y los que venden espejitos de colores con el “Sí se puede”. Lamentablemente, el presidente Macri está con los que creen que su fórmula llegará a un balotaje y sigue de gira por el país en vez de gobernar e intentar retirarse del Gobierno dejando un país con menos pobreza y hambre.

Para despejar todo tipo de dudas vayamos a la lógica. Para que el “Sí se puede” ocurra, Macri debe retener todos sus votos (dato no menor por su pésima gestión post PASO) y sumar los de Lavagna, Del Caño, Gómez Centurión y Espert en su totalidad (algo realmente imposible).  

1) Alberto Fernández-Cristina Kirchner, con 12.205.938 votos (47,786% de votos válidos).

2) Mauricio Macri-Miguel Pichetto, con 8.121.689 votos (31,796% de válidos).

3) Roberto Lavagna-Juan M. Urtubey, 2.081.315 votos (8,148% de válidos).

4) Nicolás del Caño-Romina del Plá, 723.147 votos (2,831% de válidos).

5) Juan José Gómez Centurión-Cynthia Hotton, 670.162 votos (2,624% de válidos)

6) José Luis Espert-Luis Rosales, 550.593 votos (2,156% de válidos)

También sumar un 5% de votos de Alberto. Sería algo así de un millón de votos. Por citar un ejemplo que todo Tucumán vaya para el Presidente. ¿Ustedes conocen a algún “kumpa” que se anime? Imagínense un millón.

Un relevamiento total de todas las encuestadoras (serias, no serías, del kirchnerismo y del Gobierno) da como resultado que Alberto Fernández supera a Macri por 20 puntos.

El Gobierno está en retirada. Han hecho la peor gestión de la historia de nuestro país en tiempos de democracia. De hecho, Macri se quejó hace horas de los niveles de inflación con los que vivimos y que eso nos mata a todos. Pareciera que nunca se dio cuenta que fue el presidente de la Argentina durante cuatro años. No existe un ítem que se pueda valorar. Y no me vengan a hablar de corrupción y transparencia. El tiempo me dará la razón cuando la Justicia empiece a ponerse los pantalones.

La multitudinaria "Marcha del Millón" fue impactante. Muchas personas al grito del "se da vuelta" y "sí se puede". Los macristas intentaron comparar la marcha de hoy con la de Alfonsín en el año 1983. Si revisaran lo que pensaba Alfonsín de Macri se caen de traste. Ni hablar si Alfonsín junior llega a ocupar un cargo en el gobierno de Alberto Fernández.

Volviendo a la manifestación del Obelisco vale decir que no cumplieron con el objetivo de un millón de personas pero si se vio representado en la calle al voto anti peronista. De hecho, el grito más fuerte que sonó durante el acto fue "que vaya presa" en alusión a la ex presidente Cristina Kirchner. Lo más loco fue que los mismos que pedían detener a la futura vicepresidente alentaban a Miguel Ángel Pichetto. Recordemos que fue el candidato a vicepresidente de Macri quien no quiso quitarle los fueros a Cristina para que vaya presa. 

A horas de las PASO 2019 pedí que se piense el 28 de octubre. El 27 de octubre se termina el proceso de anomalía presidencial. La transición hasta el 10 de diciembre es larga y disparatada. Un pacto de Olivos será fundamental.

El lunes 28 de octubre no será un día más. Ese mismo día, el equipo económico y social de Alberto Fernández debe tomar poder. Para que los actuales no nos hundan más y para que los nuevos sepan y cuenten a toda la sociedad en dónde estamos realmente parados. Alberto y su gabinete deben ser claros y tiene que mostrar cada detalle del desastre. Oportunidad que perdió Macri cuando asumió.  

La salida del desastre que nos deja la gestión Macri llevará muchos años. Seguramente mis nietos (y todavía no fui padre) sean víctimas de la brutalidad que nos dejó Cambiemos.