"La maté, la maté", habría dicho el sospechoso del crimen de la diseñadora
Así lo señala el informe publicado por la fiscalía que investiga el asesinato de Celina Bergantiños.
La investigación por el crimen de Celina Bergantiños derivó en la hipótesis de una eventual relación amorosa entre la diseñadora asesinada y el supuesto autor del crimen Miguel Ángel Santa Mariña (el esposo de una amiga de la víctima), quien habría confesado a dos amigos ser el asesino, según un informe publicado por la Fiscalía de Instrucción N° 39, a cargo de María Paula Asaro,
"La maté, la maté", habrían sido las palabras que utilizó el acusado para explicarle a dos amigos lo ocurrido, luego del velorio de Celina, cuando los convocó en una estación de servicioen Monte Grande, según el relato testimonial de sus amigos. También dijo que lo había hecho por el robo de unas calzas en el local de su mujer.
Del informe se desprenden los testimonios de los amigos y de un empleado de un garaje lindero al PH de Bolívar 743, que relatan que un sujeto (que sería Mariña) dejó un Citroen C4 (mismo auto que el del acusado) entre las 14 y las 15 del miércoles 2 de octubre.
Luego regresó sin auto el viernes 4 y preguntó si tenían cámaras de seguridad, para luego solicitar ver las grabaciones porque "estaba teniendo problemas de pareja y su esposa no le creía que había estado en el lugar".
El mismo hombre dijo que "era cerrajero y que no le correspondía trabajar en esa zona por lo cual, para evitar problemas con su jefe y con sus compañeros de trabajo necesitaba que borraran las cámaras de seguridad del día miércoles". Y ofreció "todos los ahorros" para que fueran borrados.
Por último, el informe añade que "frente a lo inverosímil que resulta, hasta el momento, el móvil invocado por Santa Mariña para perpetrar el ataque a la víctima (la supuesta sustracción de las calzas del local), los investigadores no descartan la posibilidad de que entre la víctima y el imputado "hubiese una relación de pareja alternativa".
A partir de estas conjeturas, la fiscal Asaro pidió a la jueza Silvia Ramond -a cargo del Juzgado Criminal de Instrucción N° 21- la detención de Santa Mariña, el allanamiento de su domicilio y la realización de pruebas de ADN que se cotejara con el material genético extraído de las uñas de Bergantiños.