La marcha de silencio por la muerte de Nisman sumó al arco opositor y el kirchnerismo contraatacó
La movilización sumó a diversos referentes contrarios a las ideas del Gobierno Nacional y el oficialismo recrudeció las críticas.
Tras la muerte del fiscal Alberto Nisman, la sociedad no ha dejado de sufrir una fuerte convulsión. La Asociación de Fiscales consideró que este suceso no podía pasar desapercibido y por ello convocó a una marcha de silencio cuyos estandartes serán Memoria, Verdad y Justicia. La movilización sumó a una gran parte del arco opositor. A raíz de este hecho, el sector reaccionario del oficialismo no tardó en atacar la iniciativa.
La marcha de silencio convocada por los fiscales Carlos Stornelli, José María Campagnoli, Guillermo Marijuan y Ricardo Sánchez fue propuesta el viernes pasado y ya fue etiquetada con el hashtag #18F. La idea de la movilización, que se llevará a cabo el 18 de febrero, es la de resaltar la importancia que tuvo la muerte de Alberto Nisman para la estabilidad de República. El "respeto", según el propio Marijuan, será la esencia de la manifestación.
Referentes de la oposición ya expresaron que acompañarán a los fiscales y a todas aquellas personas que quieran sumarse a la iniciativa. Entre las figuras más destacadas, Mauricio Macri, Jefe de Gobierno de la Ciudad, los diputados Julio Cobos y Elisa Carrió ya confirmaron que se encontrarán entre los presentes.
Precisamente fue a raíz de la confirmación de estas asistencias que la organización kirchnerista Justicia Legítima expresó: "(La marcha) no va a servir para homenajear a Nisman, sino para saber quién está de qué lado". De este modo, la agrupación que responde a la procuradora Alejandra Gils Carbó, dejó en claro que el Caso Nisman tiene "dos bandos" o "lados" opuestos.
Por su parte, durante el día sábado, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, expresó: "Somos extremadamente respetuosos de todas las manifestaciones públicas, pero creemos que es necesario tener un nivel de evaluación de por qué se realiza. Esta marcha del silencio deberá tener algún objetivo, que seguramente los organizadores tendrán que explicar". Así, el funcionario kirchnerista solicitó que los fiscales se expliquen por realizar la marcha.
El secretario de la Presidencia, Aníbal Fernández, no quiso quedarse atrás e hizo saber su postura con respecto a la movilización por lo que comentó: "Entre ellos (entre los fiscales) hay gente que no se movió por otros argentinos en los momentos más duros de la democracia". Además, disparó contra el exjuez Julio César Strassera, por haber rechazado un pedido de hábeas corpus de un gobernador de Santa Cruz durante la última Dictadura Militar. A su vez, Strassera le respondió que ni Néstor ni Cristina Kirchner le firmaron los pedidos al mismo funcionario, Jorge Cepernic.
Elisa Carrió, quien entabló un fuerte cruce con Aníbal Fernández y hasta lo denunció ante la Justicia en las últimas horas, opinó en Twitter: "Hay que ponerle el cuerpo a la marcha del silencio, yo voy a estar ahí. Hay que ponerle el cuerpo a la República y a la Constitución y salir a la libertad, de la dictadura K".
De esta manera, la marcha de silencio terminó sufriendo los filtros políticos que terminaron por depurar una propuesta en la que, según parece, sólo pueden aparecer funcionarios opositores al Gobierno Nacional.