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La mamá de Florencia y una confesión clave sobre su pareja: "Es un doble cara y nos drogaba"

Carina Di Marco, madre de la nena de 12 años violada y asesinada en San Luis, aseguró que al padrastro de la víctima, único detenido por el caso, "es un monstruo".

Carina Di Marco, la mamá de Florencia Di Marco, la chica que fue hallada asesinada y violada en San Luis, aseguró que Lucas Gómez, su pareja y principal acusado por el homicidio de su hija, las drogaba a ambas.

"Todavía no caí de que estaba con una bestia en mi casa", afirmó la mujer y luego reveló que su Gómez la golpeaba y que cree que también drogaba a toda la familia para que nadie advirtiera lo que le hacía a su hija.

En alusión a la culpabilidad de Gómez, y después de presenciar el entierro de su hija, la mujer indicó: "No dudé nunca porque sabía manipularme bien. Estaba muy ciega y no me convencida de que esta persona tenía doble cara".



En tanto, la mujer, quien horas antes de que se iniciara la tragedia estaba pariendo a su cuarto hijo,

recordó que la última agresión vivida fue durante "las fiestas porque no quería que vaya a saludar a los vecinos". "Era muy celoso, y de repente empezaba a romper todo", agregó.

En una nota brindada al canal Crónica, Carina también recordó: "una tarde le revisé el auto y encontré una pastilla que era para dormir, no recuerdo el nombre, y tenía varias tiritas. Yo le pregunté ´ ¿para qué querés estas pastillas? y él me dijo: `No, porque a la noche no me puedo dormir y me la tomo a la tarde para descansar´ y para mí que nos drogaba con eso".

Inclusive, Carina admitió que sabía que Gómez "se drogaba" , aunque "nunca" lo hizo frente a ella o sus hijos. "Un día no podía despertarlo y encontre una bolsita. Le dije que es esto, y me dijo bicarbonato de sodio para enjugarme la boca. Y le dije: Mentira, que es?, días después me confesó que se drogaba".

Ante esta situación, la mujer comentó que comenzó a tener sospechas de que su marido la drogaba a ella y a sus hijos con pastillas para evitar que advirtieran que le hacía daño a Florencia.

"Una noche tuve que comprar una pizza y mientras comíamos, de repente, a la media hora empezamos a tener mareos, mis hijos se caían cuando se levantaban de la silla, yo también, embarazada, y Florencia también", relató.