La línea D de subte estará cerrada desde el 8 de enero hasta mediados de marzo

La línea D del subte porteño permanecerá cerrada a partir del lunes 8 de enero y hasta el domingo 17 de marzo. Serán más de dos meses sin funcionamiento con el objetivo de finalizar la obra de modernización del sistema de señales y el reemplazo de las máquinas de cambio de vías. “Esto permitirá mejorar la operación garantizando la regularidad y la eficiencia del servicio con la última tecnología en materia de señalamiento”, aseguró el Gobierno porteño a través de un comunicado.

Ante la incomodidad que generará el cierre de la línea, que es la segunda en cantidad de usuarios, desde la administración porteña aseguraron que es un trabajo “necesario” para poder avanzar con el reemplazo de las 31 máquinas de cambio, verificar que todas las rutas posibles cumplan con los estándares de seguridad e identificar eventuales fallas; y finalizar la instalación del nuevo sistema a bordo de los trenes. Las fuentes consultadas por Clarín que no es posible llevar a cabo el trabajo en tramos y con cierres parciales, y que por las características se debe cerrar todo al mismo tiempo.

Además, agregaron que se eligió ese período porque durante enero y febrero hay una disminución del 40% en la cantidad de pasajeros habituales. Hacerlo en otro momento del año, "implicaría mayores complicaciones", remarcaron. Entre el miércoles 3 y el domingo 7 de enero, por su parte, el servicio de la línea comenzará a las 7 y terminará poco antes de las 21.30 para llevar adelante los trabajos previos.

Además, durante el cierre temporal se aprovechará para terminar las obras de renovación de la estación Facultad de Medicina que solo pueden realizarse con la estación cerrada, en el marco del Plan Integral de Renovación de Estaciones.

En cuanto a las explicaciones técnicas, "los sistemas de señalamiento son sistemas de control y protección de las formaciones, cuya función principal es que circulen de forma segura asignando rutas e informando la posición de los trenes para evitar colisiones, es decir que están vinculados a la seguridad y a la frecuencia del servicio", aseguraron desde la Ciudad.

La Línea D es una de las más utilizadas de la red y está en proceso de modernización. Cuenta con el 100% de su flota con aire acondicionado, por lo que fue necesaria una obra de repotenciación del abastecimiento eléctrico, que está finalizando.

En cuanto al sistema de señales, el actual, de tipo Automatic Train Protection (ATP), será reemplazado por Communications-Based Train Control, también conocido como CBTC, que ya funciona en las líneas C y H. Además de mejorar la seguridad, permitirá también hacer más eficiente la operación.

"En CBTC es un sistema de última generación cuya tecnología es adoptada por los subtes más modernos del mundo. Trabaja mediante la comunicación entre formaciones, permitiendo el máximo acercamiento de forma segura y reduciendo el intervalo al mínimo posible", explicaron desde el Gobierno porteño.

Además, agregaron que el sistema permite "determinar con exactitud la ubicación de los trenes y controlar la velocidad de circulación. Y en caso de que sea superada se puede detener la marcha. De esta manera, se logra una operación más eficiente, con intervalos más cortos y con mayor seguridad para los usuarios y usuarias de la red".

La línea D es la segunda que más pasajeros transporta. Según datos de la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad, en octubre de este año tuvo 4.868.232 usuarios. Mientras que en enero transportó 3.400.121 y en febrero 3.502.277.

En cuanto a las alternativas de movilidad para los pasajeros que usan la línea D, fuentes del Gobierno porteño afirmaron que la traza empalma con más de 40 líneas de colectivos, que pueden usarse como opción a lo largo de las distintas avenidas que recorre, como Diagonal Norte, Córdoba, Santa Fe y Cabildo. En este último tramo está el metrobus.