La Justicia de Estados Unidos embargó a Argentina por 210 millones de dólares por bonos en default en 2001
Eran fondos del Banco Central depositados en la Reserva Federal. El miércoles, los tenedores de cupones PBI lograron quedarse con la garantía de US$ 325 millones que el país había dejado para poder apelar un juicio en Reino Unido.
No está siendo una buena semana en los tribunales internacionales para la Argentina. El miércoles bonistas que habían demandado al país por el pago del cupón PBI en Londres lograron ejecutar una garantía de US$ 325 millones que el país había dejado para poder apelar el fallo en contra.
Y este viernes, en Nueva York, la jueza Loretta Preska -que reúne los casos contra Argentina en el Distrito Sur- habilitó el embargo de US$ 210 millones para que fondos buitre que no ingresaron en los canjes que hubo desde entonces se cobren parte de sus deudas por el default de 2001.
"La Juez Loretta Preska aprueba el embargo de USD 210 millones correspondientes al colateral de los Bonos Brady. En la misma orden, congela otros USD 100 millones hasta que dos grupos de acreedores de deuda en default (Attestor Master y Bainbridge Fund), culminen la disputa por estos USD 100 millones", explicó en la red social X Sebastián Maril, un especialista que sigue al detalle las demandas contra el país a nivel internacional.
Esos fondos que se embargan pertenecían a una cuenta que tiene el Banco Central en la Reserva Federal de Estados Unidos, con fondos que se utilizaron en su momento para garantizar el pago de los bonos Brady.
Attestor Master tenía deuda argentina vencida por US$ 460 millones y Bainbridge Fund, por US$ 100 millones.
También en Europa
Por otro lado, este miércoles los tenedores de los bonos denominados "cupón PBI", que ganaron el juicio contra el país en el Reino Unido, ejecutaron la garantía de 313 millones de euros (unos US$ 325 millones) requerida para apelar el juicio por 1.330 millones de euros que se había perdido en primera instancia. Como la apelación fue rechazada y se confirmó el fallo en contra, Argentina debe empezar a pagar.
En este caso, los demandantes fueron los fondos Palladian Partners, HBK Master Fund, Hirsh Group LLC y Virtual Emerald, que tenían cupones PBI, que estaban atados al crecimiento. Es decir, recibían un pago en tanto la Argentina superara cierto porcentaje de crecimiento. Estos acreedores acusaron a Argentina de haberlos perjudicado al modificar la forma de medir el PBI y, en consecuencia, haberle pagado menos en 2013.
Trabajo para la Procuración
Los dos embargos sobre activos argentinos por juicios perdidos a nivel internacional llegan en la primera semana de trabajo del nuevo procurador del Tesoro de la Nación, Santiago María Castro Videla, quien reemplazó al despedido Rodolfo Barra.
El abogado de 43 años, formado en la Universidad Austral, se encontrará con varios fallos ya confirmados a los que en algún momento habrá que encontrarle una salida, como los US$ 16.000 millones que el país debe pagar tras perder el juicio de los accionistas minoritarios por la estatización de la petrolera YPF, en 2012.
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