La Justicia convirtió a Leonardo Fariña en el nuevo cartonero Báez
Hace pocas horas te contamos el recorrido del dinero de Fariña hoy depositado en bancos del exterior. Hasta el miércoles esos 9 millones eran intocables, pero ya no.
Pero el fallo del juez Casanello procesándolo por lavado de dinero no queda sólo en el ámbito del país. Ya lo tienen en su poder los organismos internacionales que persiguen ese delito y aunque esos 9 millones de dólares puedan estar a nombre de sociedades, el rastreo final lleva a saber que su titular es Fariña.
Y esas cuentas ya deben estar inmovilizadas. Los bancos reciben la comunicación que les impide que cualquier persona física o quien pretenda transferir ese dinero sea vea imposibilitado de hacerlo.
Ni los autos de alta gama se pueden tocar pues no pertenecieron a Fariña ni a testaferros. El departamento donde vivía con Karina Jelinek pertenece a su mentor Carlos J. Molinari, quien con un simple trámite judicial justifica ser el único dueño y según un rumor que circulaba hace meses, Molinari lo pensaba vender y Karina Olga deberá ir buscando nueva vivienda.
Parte de ese dinero está en bancos de Panamá, que hace años dejó de ser esos paraísos fiscales infranqueables. Hoy Panamá mejoró ostensiblemente su relación con Estados Unidos y con los organismos y agencias que vigilan el dinero surgido de drogas, tráfico de armas y corrupción. Ese país suscribió los tratados internacionales de entregar las nóminas de cuentas secretas cuando se sospecha o se comprueba que el dinero fue ganado ilegalmente.
Así que aunque en el día de mañana recobre la libertad, Fariña no podrá mover esa suma que los bancos han inmovilizado. No lo hizo estando preso por su desconfianza total con todos, a nadie le entregó las claves para hacerlo y ahora se quedó sin nada.
Le queda ese puchito de un millón y medio de dólares que le guarda su última noviecita, pero si sus llamadas desde la cárcel han servido para identificar a la joven y su lugar de residencia, la justicia la puede intimar a que revele dónde está escondido ese palito y medio verde y lo entregue.
¿Registrás quien fue el cartonero Báez? Rafael Cristiano Báez fue un "ciruja" que declaró en la causa contra Carlos Monzón asegurando que vio -en 1988- tras una ligustrina de la casa marplatense como el boxeador arrojó a su ex pareja Alicia Muñíz quien murió en el acto (si no estaba muerta antes por un puñetazo fatal de Monzón).
Hasta le puso el nombre a un libro llamado "Yo derroté a Carlos Monzón" y cobraba dinero por conceder entrevistas.Báez fue el cartonero más famoso de la Argentina, murió en el 2003 a los 81 años.
Hoy Fariña podría ser el nuevo cartonero Báez si sale del penal pronto (ahora está más complicado que hace días), salvo que hago lo que una vez le recomendó el gran Pappo a un pinchadiscos: "Nene, buscate un trabajo honrado".