La Justicia anuló la condena al policía Luis Chocobar y ordena que se realice un nuevo juicio
El policía había sido condenado a 2 años de prisión en 2021. Ahora habrá un nuevo debate oral.
La Justicia resolvió anular la condena a dos años de prisión contra el policía Luis Chocobar y solicitó que se realice un nuevo debate oral. Así lo confirmó el abogado del oficial, Fernando Soto.
“La Sala II de la Casación Nacional anuló el juicio oral que le hicieron a Chocobar. Manda a hacer un nuevo juicio oral”, informó Soto en su cuenta de Twitter. Al mismo tiempo, celebró: “¡Ley y orden!”.
Chocobar había sido condenado a dos años de prisión en suspenso y cinco años de inhabilitación en 2021 por haber matado a balazos al delincuente Juan Pablo Kukoc, quien atacó a puñaladas a un turista estadounidense en el barrio porteño de La Boca en 2017.
La condena era excarcelable, por lo que el policía bonaerense no fue preso. Sin embargo, en aquel momento su abogado había advertido que “fallaron en contra de las pruebas de la causa”.
“Para la seguridad argentina, este fallo es triste”, dijo Patricia Bullrich en aquel momento. La actual ministra de Seguridad también cumplía funciones en ese cargo cuando ocurrió el episodio y fue una de las figuras políticas que más acompañó a Chocobar en todo el proceso. “El policía actuó en cumplimiento de su deber”, remarcó el día de la condena.
En sus fundamentos, el Tribunal Oral de Menores N°2 consideró “innecesario y desproporcionado” el disparo final que provocó la muerte del asaltante, ya que no resultaba “peligroso para nadie”, y determinó que el condenado incumplió “la normativa nacional e internacional” sobre el uso de arma.
El juez Pisano explicó que Chocobar estaba de civil cuando vio al turista estadounidense Frank Wolek que pedía auxilio tras ser asaltado y apuñalado por dos delincuentes que le sustrajeron su cámara de fotos, uno de los cuales resultó ser Kukoc, que huyó corriendo.
“Resulta evidente para mí que el comienzo de su accionar estuvo completamente justificado a tenor del marco legal que regula su actividad. Pero en un preciso momento de la persecución, la actuación del policía acusado dejó de estar justificada para tornarse excesiva en extenso e intenso, por resultar innecesaria y desproporcionada al legítimo fin primigeniamente propuesto”, señaló.
Para el Tribunal no se trató de un caso de “legítima defensa” como alegó la defensa del efectivo en aquel momento, ya que “poquísimos segundos más tarde se apartó de la normativa permisiva al herir con su última salva a Kukoc cuando ya se encontraba a bastante distancia, sin armas a la vista, ni representar peligro alguno”.
“En pocas palabras, Chocobar no debió efectuar ese último disparo que impactó a Kukoc en su pierna izquierda cuando se alejaba corriendo sin resultar peligroso para nadie. No puede aceptarse la aprehensión de un sospechoso sacrificando el cumplimiento de la normativa nacional e internacional de aplicación obligatoria que razonablemente regula el oportuno uso de las armas de dotación asignadas al personal policial”, sentenció.
Por último, el juez aseguró que “Chocobar no tuvo intención de matar según lo demuestran el comprobado impacto de rebote en la región lumbar, la herida en la pierna izquierda de Kukoc, y el haber cesado de inmediato sus disparos al verlo caer al suelo”, por lo que descartó la hipótesis de la querella respecto a que se trató de un “homicidio agravado cometido en abuso de la función policial”, que prevé la pena de prisión perpetua.
Cómo fue el caso Chocobar
El 8 de diciembre de 2017, el turista estadounidense Frank Wolek (60) caminaba por el barrio de La Boca y poco antes de llegar a la calle Caminito fue sorprendido por dos delincuentes que le robaron su equipo de fotografía.
En ese momento, uno de los asaltantes, Juan Pablo Kukoc, lo apuñaló una decena de veces en el pecho y lo dejó gravemente herido. Luego, escapó del lugar caminando.
A unas pocas cuadras, el joven fue interceptado por dos personas que habían visto el ataque y Chocobar, que en ese momento que era Policía Local de Avellaneda, se identificó y le pidió que se detuviera. El joven no lo hizo, intentó escapar y el efectivo disparó y mató a Kukoc de un balazo en la espalda.
Un peritaje realizado por expertos de la Policía Federal reveló que la bala que disparó el policía y mató al ladrón primero rebotó en el asfalto, lo que para su defensa demuestra que no apuntó a matar, sino a las piernas.
(Fuente: TN)
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