La Inspección General de Justicia emitió un comunicado para desligarse del papelón en la AFA
La IGJ quedó en el ojo de la tormenta tras los bochornosos comicios que buscaban definir al próximo presidente.
La Inspección General de Justicia (IGJ) emitió un comunicado acerca de las escandalosas elecciones en AFA y se desligó del bochornoso transcurso de los comicios, que terminaron con un imposible 38 a 38 (votaron 75 asambleístas).
"La IGJ aportó inspectores en calidad de veedores del comicio y no en carácter de Junta electoral", aclararon. "La Comisión Escrutadora fue la que pidió que no sea filmado el escrutinio y que no sea cantado a viva voz cada voto mientras se abría cada sobre, a los efectos de evitar abucheos, cánticos, etc. Ello, con el fin de proclamar al ganador al final del conteo de votos", agregaron.
Comunicado de la Inspección General de Justicia
Respecto de la elección celebrada en AFA el día 3 de diciembre, la Inspección General de Justicia aportó inspectores de la Dirección de Entidades Civiles en calidad de veedores del comicio, y no en carácter de Junta Electoral, extremo que ocurre a pedido de parte o ante denuncias que deriven en dicha consecuencia. Hechos que no ocurrieron en el presente.
En consecuencia fue la Comisión Escrutadora la que estaba en condiciones de abrir los sobres, manipular las boletas, y apilarlas para luego contabilizarlas. En la apertura de sobres estuvieron presentes los miembros de la Comisión, con representantes de ambos candidatos, junto a los veedores de IGJ, y el Defensor del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires.
Es menester destacar que los veedores de la IGJ colaboraron, a pedido de AFA, en controlar y reponer en su caso boletas faltantes de los cuartos oscuros cada quince (15) votos emitidos, verificar que las boletas y los sobres se encuentren firmados, y todo otro pedido de colaboración de la Comisión Escrutadora, único responsable del comicio. Pero no en la apertura de sobres y orden
de boletas para su conteo posterior.
En la etapa de apertura de los sobres, en dos ocasiones se advirtió la existencia de doble voto en un mismo sobre, ambos del mismo candidato. En esos casos se procedió a contabilizar un único voto, descartando el otro.
Probablemente en un tercer caso dicha boleta doble no fue advertida, sumando setenta y seis (76) las boletas repartidas en sendas pilas que correspondían a cada candidato, habiendo votado solamente setenta y cinco (75). Cabe destacar que fue la Comisión Escrutadora la que pidió que no sea filmado el escrutinio, y que no sea cantado a viva voz cada voto mientras se abría cada sobre, a efectos de evitar abucheos, cánticos, etc. Ello, con el fin de proclamar al ganador al final del conteo de votos. Lo que ocurrió, de público conocimiento, es que ambos candidatos contabilizaron erróneamente treinta y ocho (38) votos, resultado no posible con setenta y cinco (75) votantes.
A efectos de conocer si se encontraban todos los votantes para repetir el procedimiento, la IGJ pidió se nombre a cada uno de los asambleistas, detectando que dos (2) ya no se encontraban en el recinto, pocos minutos después de advertido el error. Fue así que se tornó imposible repetir la votación, pasándose a un cuarto intermedio.