La información que tiene la AFIP hasta el momento sobre la sospechosa cuenta de Nisman
El fiscal tenía una cuenta bancaria en EE.UU. que jamás declaró en el país. Los otros cotitulares: Diego Lagomarsino, Sara Garfunkel y Sandra Nisman.
Diego Lagomarsino, el hombre clave del la investigación por la muerte del Alberto Nisman, reveló en el último tiempo que el fiscal tenía una cuenta bancaria secreta en Estados Unidos. De las palabras del colaborador de Nisman se supone, sin mayores certezas, que esa cuenta era utilizada para desviar fondos. Por esta razón, la AFIP investiga en estos momentos la actividad de este depósito de fondos. Lo que se sabe, hasta el momento, compromete al entorno del fiscal.
La Administración Federal de Ingresos Públicos centró sus cañones en la cuenta bancaria radicada en Estados Unidos y cuyos titulares son Alberto Nisman, Diego Lagomarsino, Sara Garfunkel, madre del fiscal y Sandra Nisman, hermana del hombre investigado. Si bien esta última mujer declaró "no saber nada" de la cuenta, lo único que se concoe con certeza es que a raíz de su existencia es que se la AFIP también investiga un campo en Uruguay, propiedad del fiscal.
Fue a raíz de declaraciones realizados por Diego Lagomarsino que la entidad fiscal decidió dar comienzo a sus averiguaciones. El colaborador de Nisman expresó en televisión que sólo tiene constancia de dos transferencias realizadas por el fiscal a esa cuenta. Ambas fueron por un valor de 2500 dólares, en concepto del pago de expensas trimestrales de un terreno radicado en Uruguay, según relata el diario Perfil.
La cuenta en cuestión disparó las sospechas a niveles inusitados porque jamás fue declarada en el país. La información comenzó a circular de manera secreta cuando Sandra Nisman decidió contarle a Sandra Arroyo Salgado, ex mujer de Nisman y parte querellante de la causa, sobre la existencia de esta cuenta, según informa el diario Perfil.
A partir de los hechos, la figura de Diego Lagomarsino volvió a cargarse de las más oscuras sospechas. El entorno familiar del difunto fiscal, por su parte, también fue arrastrado al ojo del huracán. Hasta el momento, lo único se sabe con precisión sobre la cuenta son sus titulares y el hecho de que jamás fue declarada en el país.