La impotencia de presenciar un nuevo hecho de inseguridad
Por Mariano Bertotto. Ocurrió en el tren de la línea General Roca, al mediodía, cuando una mujer fue golpeada por un ladrón que robó su celular y se arrojó del ferrocarril en movimiento. ¿La Policía? Nunca apareció.
Por Mariano Bertotto
Mbertotto@diarioveloz.com
@MarianoBertotto
Era un viaje común y corriente. El tren de la línea General Roca, que trasladaba a los pasajeros desde La Plata hacia Constitución a eso de las 13 horas, no estaba repleto pero sí tenía la gran mayoría de los asientos ocupados. Con gente parada en los pasillos de los vagones y con otro puñado ubicado cerca de las puertas.
Todos los pasajeros “en su mundo”. Algunos leyendo, otros escuchando música, otros durmiendo y los restantes mandando mensajes con su celular. Sin embargo, había un hombre que, si bien pasó por desapercibido en ese entonces, estaba atento a todas aquellas personas que se encontraban en su mencionado mundo.
Se trata de un ladrón que estaba buscando el momento justo para dar con el hecho..
Luego de que el tren arrancara en la estación Avellaneda, el malhechor esperó a que tome gran velocidad para así hacer “su trabajo”: le arrebató un celular último modelo a una mujer, la golpeó y luego se arrojó del ferrocarril.
Todos los pasajeros quedamos sorprendidos con lo sucedido, mientras que la víctima luego de varios gritos estalló su bronca mediante llantos. Nadie supo qué hacer.