La fiesta de los zancos
Estrechos y empinados callejones sirven de pista para una celebración española tradicional.
Caminar con zancos es una tarea no muy alentadora para la mayoría de la gente, pero para los "danzadores" de Anguiano, España, se trata de una caminata común por el parque. Durante la Danza de los Zancos, que se celebra anualmente, salen a la calle con zancos de madera de medio metro y van a todo lo que da bajando los callejones más empinados de la ciudad. Se arriesgan a romperse la nuca o darse un mazazo en la cabeza contra el pavimento en honor de María Magdalena, llamada allí "La Magdalena".
Todos los 22 de julio se lleva a cabo esta tradicional y fascinante fiesta en honor a María Magdalena, una de las santas más populares en esta zona del país europeo, donde ocho valientes pibes de las más antiguas familias de la ciudad se ponen camisetas coloridas, camisas blancas y polleras amarillas, y bailan sobre los zancos de madera.
No se trata solo de caminar, sino de dar vueltas y girar a altas velocidades en los estrechos y empinados callejones de la ciudad sin más que un colchón humano de espectadores preparado para agarrar a los que pierden el equilibrio. Y como si esto fuera poco, mientras bajan la pendiente, hacen sonar las castañuelas. ¡Olé!