La familia de Joaquín Sperani cree que el crimen fue planificado: “Lo engañó y lo mató con salvajismo y perversidad"

La muerte de Joaquín Sperani, el adolescente de 14 años encontrado asesinado este domingo en una casa abandonada de la localidad cordobesa de Laboulaye, sigue envuelta en el misterio. Mientras uno de sus amigos permanece detenido como principal sospechoso, la familia afirma que el crimen fue planificado. "Lo engañó y lo mató con un salvajismo y perversidad tremenda", manifestó uno de los tíos de la víctima.

El atroz homicidio de Joaquín conmovió a los vecinos de la localidad cordobesa, muchos de los cuales participaron de la búsqueda que terminó de la peor manera el domingo al mediodía.

"Es un momento difícil. Teníamos una vida tranquila. Es un pueblo realmente muy unido. Vivimos en paz. De repente nos pasó esto. Nunca más vamos a poder retomar la misma vida que teníamos. La mamá y el papá estan muy quebrados. Joaco era muy pegote a mí, estamos todos muy mal. No entendemos por qué este chico hizo lo que hizo", comenzó su relato Esteban Sartori, tío de Joaquín.

Un chico de 14 años, amigo íntimo de la víctima, confesó la autoría del asesinato, cometido a golpes, y este lunes fue trasladado al Complejo Esperanza, de la ciudad de Córdoba. "No recibió la educación que tenía que recibir de la casa. Desde ahí ya arranca el problema de este pibe", señaló Sartori, en diálogo con Radio Con Vos.

"Supongo que no recibió por parte de los padres los valores que tiene la vida. Por eso, creo que hizo lo que hizo. El pibe no tiene toda la culpa. Acá hay algo más difícil de entender. Hay que volver con el tiempo hacia atrás para ver la educación recibió", sugirió.

En esa línea, planteó que no cree que "este crimen venga por parte del bullying, sino a la salud mental de una persona". 

Según los primeros detalles que trascendieron, Joaquín y su amigo ingresaron al colegio el jueves a la tarde y salieron a los pocos minutos, lo cual quedó registrado en los videos de cámaras de seguridad ubicadas en las cercanías del establecimiento.

A unos cien metros, en una casa abandonada en la calle Sarmiento 480, los adolescentes ingresaron y sólo uno de ellos salió de allí con vida. Una prima de Joaquín, junto a otros vecinos, encontraron el cuerpo en esa propiedad.

"Este chico había planeado matarlo a Joaquín. Por eso lo engaña y lo lleva al lugar donde lo ejecutó. Lo mató con un salvajismo y perversidad tremenda. Con un odio y un resentimiento, que no tienen explicación", describió el tío de Joaquín.

"El asesino lo engañó y lo llevó (a la casa abandonada) para matarlo, como nos engañó a todos. Es de una mente muy perversa. Se ve que es un chico muy inteligente", añadió.

En ese sentido, expresó que no encuentra explicación en la forma en que lo mataron. Por eso, sospechan de que "hubo alguien más", una hipótesis que ya había barajado la madre del nene asesinado. "Por la forma en que está muerto Joaquín, supongo que acá han participado más personas", explicó Sartori.

La autopsia determinó que Joaquín recibió más de 10 golpes en la cabeza y que sufrió un daño encefálico que le provocó la muerte inmediata. "Tiene 18 golpes fuertes en el cuerpo. Yo personalmente pude verle la cabecita a Joaquín y tiene dos agujeros grandísimos hechos. Le han metido un caño de punta en la cabeza. Es una cosa hasta diabólica", concluyó el tío.

La madre de Joaquín responsabilizó a la escuela

Mariela Flores cargó contra el Instituto Provincial de Educación Media (IPEM) Nº 278 Malvinas Argentinas, al que asistía su hijo: "Que se hagan responsables, porque mi hijo fue a la escuela".

"Se supone que hay un seguro y que tienen que ser responsables cuando los hijos van hasta la escuela. Mi hijo fue, su bicicleta estaba ahí, y me lo entregaron en un cajón", lanzó.

La mujer deslizó que detrás del crimen "hay algo más", y consideró: "Presiento que no fue solamente Leandro (el menor detenido). Me parece que pueden haber más (implicados). Quiero que se investigue como debe ser. Quiero ver imágenes desde que Joaquín salió de mi casa hasta que llegó a la escuela".

"Quiero ver con mis ojos todo el recorrido, con quién se cruzó y qué hubo hasta el momento que aparece ahí. No que me muestren el pedacito que va hasta Sarmiento y dobla. Eso a mí no me llena. ¿Qué hicieron los policías? ¿No golpearon en la puerta ni en ese vecindario a ver si estaba Joaquín y tuvo que encontrarlo mi sobrina?", cuestionó.

Luego, agradeció "el acompañamiento de la comunidad" y los convocó a participar de una nueva marcha, este martes a las 21, desde la escuela hasta la Fiscalía. "Queremos justicia por Joaquín. Que no quede impune. Quiero saber quién fue y por qué mataron a mi hijo", exigió.

Compañeros de banco, el vínculo entre los alumnos

Andrea Fessia, inspectora general de Educación Secundaria del colegio IPEM Nº 278 dijo que "no hubo situaciones sostenidas que hagan pensar que Joaquín era víctima de bullying" y que tanto él como su presunto homicida, identificado como Leandro, iban a tercer año.

"Ellos tenían en el aula una buena relación, en algún período del ciclo 2023 se sentaron juntos pero luego dejaron de hacerlo", relató Fessia, en diálogo con radio Mitre Córdoba.

"Nosotros lo que hacemos es trabajar con los equipos técnicos del Ministerio de Educación, con profesores, coordinadores de cursos y preceptores", explicó. 

Por último, en cuanto a las acusaciones que reciben por parte de la familia de Joaquín, la inspectora expresó que desde el colegio "van a seguir indagando en el tema y van a ir a fondo".