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La embarazada baleada ya respira por sus propios medios, pero su estado continua siendo crítico

Carolina Píparo respira por sus propios medios, pero sigue siendo un paciente crítico y comenzó a recibir alimento por boca, dijo hace instantes el jefe del Hospital San Roque de Gonnet doctor Daniel Angelleri.

La salud de Carolina Píparo, la mujer gravemente herida en una salidera bancaria mientras se encontraba embarazada de ocho meses, mejoró en las últimas horas y los médicos del Hospital San Roque de Gonnet le retiraron el respirador artificial.

Píparo, quien aún no sabe que su bebé Isidro murió el último jueves, aún permanece "delicada", aunque su diagnóstico mejoró por su recuperación en cuanto a su sistema respiratorio, informó hoy el director del centro asistencial, Daniel Angeleri.

Angeleri dijo que Carolina está "lúcida" y comenzó a recibir alimentación por la boca, aunque por el momento continúa como paciente con "pronóstico reservado".

El médico reveló que se evalúa actualmente cual puede ser el mejor momento para decirle la suerte de su bebé, que murió el jueves pasado a causa de un paro cardiorespiratorio derivado de su delicado estado de salud, a causa del trauma fetal que sufrió durante el violento asalto sufrido por su madre.

"Estamos evaluando como decirle lo de su hijito", admitió el profesional sobre esa delicada situación.

Según se supo, desde que se produjo el brutal ataque, la familia de la paciente es asistida por un equipo de psicólogos del gabinete de Atención a las Víctimas del Gobierno provincial, que
habría aconsejado que por el momento no reciba la información sobre el deceso de Isidro.

En tanto, la Policía continúa redoblando los esfuerzos para dar con Miguel Angel Silva, un hombre de 42 años al que conocen en el mundo delictivo como "Pimienta", acusado de ser quien "marcó" a Píparo en el interior de la sucursal La Plata del Banco Santander Río en el momento en el que retiraba el dinero que después le fue sustraído, el 29 de julio pasado.

Por el momento, son cinco los detenidos por el caso, entre ellas dos mujeres. Uno de los enigmas para la investigación judicial es quien de los detenidos fue el que disparó sobre la mujer embarazada a pesar de que no se resistió al asalto, aunque el principal sospechoso es
Carlos "El Pelado" Burgos, de 18 años, uno de los primeros detenidos que se entregó al verse acorralado por la acción policial.

A partir de la muerte del bebé, la causa en la que están imputados los detenidos es "homicidio triplemente calificado", de acuerdo con la solicitud elevada por el fiscal Marcelo Romero, oportunamente avalada por el juez de Garantías César Melazo.