DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

La elefanta Mara llegó a su nueva casa en el santuario del Mato Grosso, Brasil

Ahora la elefanta deberá cumplir con un proceso de adaptación que estará a cargo del personal técnico del santuario.

Luego de un largo viaje con escalas, la elefanta Mara llegó al mediodía al Santuario de Elefantes de Brasil, ubicado en Chapadas Dos Guimarães, en perfecto estado de salud y manifestando buen ánimo.

Mientras sus cuidadores y todas las personas que seguían minuto a minuto su viaje en las redes sociales lloraban de emoción, la recién llegada se puso a jugar con agua y tierra en el que será su nuevo hogar.

Si algo logró Mara en sus más de 50 años de vida fue superar las adversidades. Primero, lo hizo al salir del Circo de Rodas, donde fue maltratada por casi 25 años; luego, pudo ponerle fin al encierro del zoológico. Tras su nacimiento en India, recorrió Alemania, Montevideo y Buenos Aires, pero siempre estuvo en cautiverio. Ahora, mientras el mundo está encerrado, ella por fin es libre y vivirá junto a otros ejemplares de su especie.

Para llegar al santuario, ubicado en el estado brasileño Mato Grosso, recorrió 2700 kilómetros en una caja. El viaje duró aproximadamente cuatro días, se realizó por tierra y contó con un protocolo de traslado especialmente adaptado a las exigencias sanitarias por la pandemia que estamos viviendo.

"Que Mara esté hoy en Brasil es el resultado de una decisión que tomamos hace mucho tiempo", resaltó Eduardo Macchiavelli, secretario de Ambiente de la Ciudad. "Trabajamos todos los días cumpliendo con todos los pedidos y las regulaciones legales. Un día nos sorprendió la pandemia, adaptamos el protocolo, y hoy, Mara camina en un ambiente natural por primera vez en su vida", detalló el funcionario.

Ahora la elefanta deberá cumplir con un proceso de adaptación que estará a cargo del personal técnico del santuario. En el mismo se la relacionará con su nuevo ambiente, dieta y manejo en general. Se extenderá el tiempo que ella necesite para lograr tomar este hábitat como propio.

“Estamos todos muy emocionados y conmovidos con el todo lo que significó el traslado de Mara. Es un animal muy querido, carismático y emblemático para los vecinos. Que pueda vivir el resto de su vida en ambiente natural es un mensaje y una lección para entender cuál es la relación que tenemos que tener con la naturaleza”, reflexionó Macchiavelli.

El subsecretario a cargo del Ecoparque, Federico Iglesias, que acompañó a Mara durante su traslado y fue mostrando minuto a minuto todos los detalles, contó que "el viaje fue largo pero en todo momento la elefanta estuvo muy bien y de muy buen ánimo además de estar permanentemente monitoreada por veterinarios y cuidadores”.

En las redes sociales del santuario también festejaron la llegada de Mara. "Bienvenida Mara! Después de 2000 kilómetros recorridos llegó el gran momento! Tu nueva vida está por comenzar", escribieron en Instagram junto a una foto de la elefanta.

El Santuario de Elefantes Brasil abarca 1133 hectáreas, lo que le dará más espacio con pastizales, arroyos, colinas escarpadas y la posibilidad de conocer a otros elefantes asiáticos que ya viven en la reserva. "El entorno en el que vive pasaría de ser de unos miles de metros cuadrados a hectáreas, entonces las escalas de las decisiones que podría tomar, de los desafíos que va a presentar en cuanto a las ofertas de comida, a los comportamientos, el vínculo con la tierra, con el agua y con otros elefantes, no tiene comparación", describió hace días el médico veterinario Guillermo Wiemeyer que trabajó en su traslado.

Dejá tu comentario