La denuncia de una joven de 16 años que fue golpeada y dejada esposada por la policía bonaerense
La vivienda familiar de Sheila S., de 16 años, fue allanada en la Isla Maciel en busca de drogas. La fiscal de la causa ordenó reducir a la joven.
Sheila S. de 16 años acudió a la dependencia del programa ATAJO en Dock Sud para denunciar a los policías bonaerenses que, según su relato, irrumpieron en su casa de la Isla Maciel. Los acusó de maltrato de parte de la fuerza ya que la habría dejado esposada horas después del operativo y que cruzó ciertos límites.
La joven llegó con las esposas puestas y denunció que se encontraba durmiendo cuando ingresó personal de la policía de la Provincia de Buenos Aires con armas de grueso calibre, apuntando a todos los que estaban en la casa, que se asustó, por lo que subieron a la habitación junto con su mamá, y todos los policías se dirigieron a la planta de arriba. Entonces esposaron a su padre y comenzaron a golpearlo.
Sheila le pidió a la policía que pararan: allí, aseguró la menor, un policía de sexo masculino "la agarró violentamente y la ahorcó contra la pared".
De acuerdo a la joven, una mujer policía la agarró de los brazos, la esposó y la encerró en una habitación. Sheila comenzó a gritar y la policía le dio un cachetazo. "Como ella siguió gritando llegaron otros dos policías masculinos, quienes le pegaron cachetazos, sujetándola del cuello", refleja el oficio de ATAJO elevado a la Justicia.
Finalmente, Sheila se quedó sola con la mujer policía y aseguró que la mujer policía, le lanzó: "Todo lo que digas me lo paso por los huevos, negrita villera. Dejá de gritar, guacha de mierda". Desde una ventana, la menor vio a su tía, a quien le gritó para pedir ayuda.
Según fuentes policiales, en la vivienda de Sheila se encontraron drogas en la casa de la familia de Sheila: 350 envoltorios de cocaína y 30 tubos, casi 600 gramos, de polvo fraccionado. Pero el operativo, según la denuncia de la joven, cruzó ciertos límites.
Sin embargo para el hermano mayor de la joven, que la acompaño a hacer la denuncia, la droga fue plantaba por la misma policía: "Los videos los vamos a presentar en la Justicia. Sheila está mal, golpeada, la ahorcaron, le tiraron de los pelos, le dieron cachetazos, es una vergüenza lo que hicieron".
Según contó el chico "la Policía entra al living, rompe una maceta y pone una caja de té, que tenía la droga. De repente traen dos testigos de la nada y dicen 'mirá lo que encontré'. Mi mamá cría siete hijos, cobra su pensión, avisó que tenía 3500 pesos para arreglar su auto, les dijo que estaban en el piso de arriba en un ropero, en una cajita, que no se los toquen. Se la robaron igual. Hasta se llevaron una cadenita de oro falso, de fantasía".