La declaración de Agustina Cosachov, la psiquiatra de Maradona, que complica a Leopoldo Luque

Germán "Pampa" Mónaco

Periodista

Los fiscales que investigan la muerte de Diego Armando Maradona intentan recopilar la mayor cantidad de evidencia posible para poder llamar a indagatoria a los, por ahora, únicos imputados por el deceso del 10, la psiquiatra Agustina Cosachov y el neurocirujano Leopoldo Luque.

Días después de la muerte del astro, la fiscal Laura Capra, los doctores Iribarren y Ferrari, supervisados por el fiscal general de San isidro John Broyad, solicitaron el allanamiento de las viviendas y consultorios de ambos médicos. Iban en busca de elementos que resulten significativos para la investigación.

Sin embargo, la declaración de uno de éstos médicos, el mismo día de la muerte de Diego, hoy toma relevancia.

INFOVELOZ accedió de manera exclusiva a la testimonial que el 25 de noviembre pasado le tomaron a la psiquiatra Cosachov, en ese momento testigo de la muerte y hoy investigada.

Eran las 13.15 aproximadamente cuando los médicos de SMG que llegaron en la ambulancia tras el llamado en código rojo, constataron el deceso del “10”.

Agustina Cosachov junto a Carlos Díaz, psiquiatra y psicólogo de Maradona habían llegado a la casa del country San Andrés para chequear cómo seguía el tratamiento de desintoxicación de la adicción al alcohol que desde hacía años tenía a mal traer al paciente. Nunca imaginaron que al ingresar a despertarlo cerca de las 11.30 hs serían los primeros en ver si vida al Diego. Es más fue Cosachov la primera que intenta reanimarlo junto a la enfermera de turno Daiana Madrid.

Los más de 60 minutos de RCP serían en vano. El máximo ídolo de todos los tiempos estaba muerto y los investigadores comenzaron con las preguntas de rigor a los presentes.

Llegado el momento de atestiguar, la Dra. Cosachov explicó desde cuándo atendía a Maradona: “Diego se encontraba en tratamiento psiquiátrico conmigo desde el mes de junio de 2020, venía ya tomando medicación psiquiátrica que le habían indicado en algunas consultas anteriores algunos especialistas. Cuando yo comencé a atenderlo a él ya tomaba medicación por lo cual realice ciertos ajustes”. 

Más adelante en el relato, tal vez sin saber lo que vendría con el tiempo, confirmó ante uno de los secretarios de la fiscalía que su coequiper Leopoldo Luque era el responsable de la salud de Maradona. “Diego se internó el día 2 de noviembre en la Clínica Ipensa de La plata. Él se internó de forma voluntaria por propuesta del Dr. Luque, quien es su médico de cabecera porque estaba consumiendo alcohol todos los días y con ciertos desajustes en relación al sueño, al apetito. Por lo que la idea de la internación si bien él aceptó voluntariamente, era hacerle una desintoxicación y ajustarle la medicación”. 

El relato de la psiquiatra siguió sin sobresaltos. A esa altura ella estaba segura de lo bien que había tratado al paciente más importante de su carrera y no se imaginaba el vendaval que llegaría con los días. Sobre el día a día de la “internación domiciliaria” agregó que “Además iba a ver a un médico clínico para seguir el tratamiento del paciente, el cual fue dos veces al domicilio, y en la última ocasión Diego se negó a recibirlo”.

“Que también solicitamos una ambulancia a disposición, pero Swiss Medical nos informó que no podía haber una ambulancia en la puerta…”. 

Su tarea era sacar a Maradona del pozo depresivo en el que estaba (junto al psicólogo) y además extraerlo del infierno que se había tornado el alcohol en la vida del 10: “Que todo el tratamiento estaba destinado a tratar la adicción al consumo de alcohol crónico y a su estado de ánimo, que ambas patologías se estaban trabajando en paralelo”, afirmó.

“Que yo fui a verlo el día miércoles 18 de noviembre de 2020, lo vi mas retraído, no quería dialogar mucho con médicos, el día anterior no había aceptado ver al clínico ni al nutricionista, tampoco al nieto ni las hijas, yo entré a su cuarto, él estaba recostado le insistí como para hablar, pero me dijo “hoy no doctora, hoy no quiero hablar (sic)”.” 

Pasada la mitad de la testimonial, Cosachov detalló el momento en que entraron a ver a Maradona y con qué se encontraron. “Que intentamos con el psicólogo siendo las 11.40 horas entrar a verlo. Desde la puerta le hablamos, parecía que Diego estaba durmiendo y le dijimos que era horario de la medicación, pero no respondió”. “Entramos con la enfermera, yo le tomé el pulso, no le sentí pulso, me fije si respiraba poniendo mi oído en su boca y no sentí respiración. 

“Daiana  yo comenzamos a hacerle compresiones torácicas y nos ayudaba Julio con la respiración boca a boca. Que no recuerdo cuanto tiempo estuvimos haciendo las tareas de reanimación, pero me dijeron que fue más o menos media hora”. 

Las tareas de reanimación no dieron resultado. Maradona murió en su cama, solo, descansando. Era el final de la vida del más grande y el comienzo de la pesadilla de los dos médicos que lo atendieron… Solo quedaba certificar su muerte, algo que haría el doctor que llegó en la primera ambulancia, que tampoco pudo hacer mucho…