La confesión del asesino de Rosa Fernández en Junín: "La maté porque me cansó"

"La maté porque me cansó", fueron las palabras que, según los investigadores, dijo Sandro González a los efectivos policiales que lo detuvieron este miércoles por la noche. El hombre es el principal acusado del femicidio de Rosa Inés Fernández, la mujer de 29 años que estaba desaparecida desde el 26 de julio en Junín.

Su cuerpo, fue encontrado esta mañana envuelto en una lona y enterrado en una obra en construcción en la que trabajaba su ex pareja.

El fiscal de Junín a cargo de la causa, Esteban Perdernera, informó que el hallazgo se produjo esta mañana luego de que ayer dos testigos se presentaran espontáneamente y aportaran información precisa sobre lo ocurrido con la víctima, ya que el propio acusado, Sandro González (40), se los había confesado.

El cuerpo estaba en la obra en construcción que el ahora detenido tenía a su cargo en un terreno de la calle Siria 624, de Junín.

"Ayer el cerco comenzó a cerrarse, apareció un testimonio contundente que pudimos corroborar con otros testimonios y a las 19.30 dispuse la detención de urgencia del imputado y a partir de ese momento comenzamos a planificar la búsqueda del cuerpo porque era muy categórico a que Rosa estaba muerta", dijo el fiscal  en declaraciones televisivas.

"Hallamos el cuerpo envuelto detrás de un muro, enterrado a un metro de distancia y sobre él había movimiento de tierra, mucho escombro compactado, estaba muy bien disimulado", detalló.

En base a los dichos de los testigos, el fiscal dijo que todo indica que el femicidio fue cometido  el día que fue vista por última ve la víctima en el domicilio de González, donde se produjo una discusión entre ellos por una "cuestión económica".

"Tenemos referenciado que el acusado recibió una cachetada y él la toma del cuello, en el momento siente que se desvanece, cae a los pies y ahí él cuenta haberla envuelto en un cobertor que utilizaba para cubrir el auto y en una lona celeste. La cargó en el baúl del auto y al día siguiente aprovechó que trabajaba en la obra, cavó el pozo y la enterró", relató Pedernera.

El fiscal dijo que no había denuncias judicializadas por violencia de género, aunque durante la investigación surgieron elementos sobre la relación violenta que mantenían al menos desde que se habían separado.

Finalmente, el fiscal dijo que cree que González actuó solo, ya que su exmujer era de contextura física pequeña y él estaba acostumbrado a tareas más esforzadas, por lo que no habría necesitado de alguien para trasladarla a la obra y enterrarla.