La Ciudad Deportiva de Boca Juniors en el recuerdo
La Ciudad Deportiva de Boca Juniors fue un paseo tradicional en los años '70. Fue premiada por su arquitectura de vanguardia. Hoy es apenas una postal de "Mi Buenos Aires perdida".
La Ciudad Deportiva de Boca Juniors fue un complejo deportivo inaugurado en 1975 por Alberto J. Armando. Cuenta la leyenda, que el vicepresidente de Arturo Illia, Carlos Perette, le regaló al Club Boca Juniors cuarenta hectáreas porque era fanático del club de la Ribera.
Poco a poco, se fueron construyendo instalaciones que disfrutaron los socios: la confitería Neptuno, las piletas de agua salada, el autocine, las fuentes de aguas danzantes, los quinchos y el parque de diversiones. 
Cada fin de semana, la ciudad deportiva de Boca abría gratuitamente al público. Fue un paseo tradicional en los años 70.
Allí también se encontraba el único acuario en su especie de Sudamérica con forma de pez. 
La Ciudad Deportiva recibió premios por su arquitectura de vanguardia. Incluso, la cúpula de la confitería cuenta con un vitral diseñado por el artista boquense Benito Quinquela Martín.
Se levantaron puentes en diferentes islas artificiales. En una de ellas, se iba a construir el estadio de fútbol que tendría capacidad para 140.000 personas. Pero, finalmente, el proyecto no prosperó.
En 1992 Boca vendió todo a una empresa privada. El lugar quedó abandonado pero hoy todavia se puede ver -en ruinas- la confitería con su cúpula rojiza en forma de volcán como una triste postal de "Mi Buenos Aires perdida".
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