La Cancillería rechaza el Referéndum: "No pondrá fin a la disputa por la soberanía"
El organismo que comanda Héctor Timerman acusó a los británicos de "introducir elementos orientados a distorsionar, cambiando la definición que el derecho internacional hace de esa controversia".
La Cancillería volvió a rechazar el referéndum convocado por el gobierno isleño sobre el futuro del status político de las Islas Malvinas. En un comunicado oficial, la Cancillería manifestó que es un "nuevo intento británico de manipular la cuestión", y agregó: "no pondrá fin a la disputa por la soberanía".
"El Reino Unido carece de derecho alguno a pretender alterar el estatuto jurídico de esos territorios, aún con el disfraz de un hipotético referéndum", expresó el ministerio de Relaciones Exteriores, que agregó que "esta votación, así como las mil consultas o votaciones más que el Reino Unido pudiera inventar en los territorios disputados, no relevan a ese país de cumplir con la obligación que el derecho internacional le impone de resolver pacíficamente la disputa de soberanía que mantiene con la Argentina mediante la reanudación de negociaciones".
El organismo que comanda Héctor Timerman acusó a los británicos de "introducir elementos orientados a distorsionar, cambiando la definición que el derecho internacional hace de esa controversia". Además, aseguró que esa actitud es "claramente demostrativa de la falta de fundamentos para sus pretensiones y sobre todo carente de buena fe".
En tanto, sostuvo que el gobierno británico eligió esa estrategia "en lugar de cumplir con sus obligaciones internacionales reanudando negociaciones con la Argentina para resolver esa controversia", como exige la comunidad internacional.
Recordó que la ONU consideró que Malvinas es "un caso especial y particular de descolonización en el que se reconoce la existencia de una disputa de soberanía entre la Argentina y el Reino Unido que debe ser resuelta por negociaciones bilaterales, teniendo en cuenta los "intereses" (no los 'deseos') de los habitantes de las Islas".
El Gobierno señaló que Reino Unido no aceptó la libre determinación de los pueblos (a la que apela en Malvinas) en otros casos de descolonización y tildó al referéndum de ser una "invocación falaz". Puso como ejemplo al archipiélago de Chagos en el cual -señala Cancillería- "expulsó a sus habitantes nativos, privándolos, al día de hoy, de su derecho a retornar a sus tierras".
"Tampoco recabó el Gobierno británico la opinión de los habitantes de Hong Kong cuando restituyó dicho territorio a su legítimo titular, la República Popular China", detalló el ministerio de Relaciones Exteriores. El domingo 10 y lunes 11 de marzo los isleños irán a las urnas en una votación con resultado cantado a favor de Gran Bretaña.