La boda de Vanucci y Matías Garfunkel
La modelo y el empresario celebraron su unión en una exclusiva velada con todos los lujos. Mirá en esta nota el álbum de fotos de la ceremonia.
Llegó el día soñado para Victoria Vanucci (28). Vestida de blanco, con una sonrisa radiante, la ex tenista se casó con su pareja, el empresario Matías Garfunkel, en una emotiva ceremonia.
"Me siento una Cenicienta. Me sorprendió mucho tener un marido como el que tengo, para mí Matías es el marido ideal. Me dio tantos gustos y tantas sorpresas que todavía estoy obnubilada", confesó la modelo a la revista CARAS, luego de la celebración y antes de irse de "luna de miel" por las principales carreteras de Europa.
En sólo un año y medio la pareja vivió una variedad de sensaciones -enamorarse, distanciarse, reconciliarse, la pérdida de dos embarazos- y decidieron consolidar las experiencias vividas juntos, con el sí ante el altar.
"Después del duro golpe que sufrimos, Matías quería casarse rápido. El más que nada lo hizo por mí, y con la ayuda de la wedding planner, Lucila Sperber, se ocuparon de todo para llegar a organizaría en tiempo récord", contó Vanucci.
La fiesta tuvo lugar el sábado 31 de marzo en la estancia "La Celeste", el campo que el empresario posee en San Miguel del Monte.
La fiesta incluyó un imponente show de fuegos artificiales, una presentación en vivo de Vicentico, una decoración esmerada, y la asistencia de famosos y figuras del Jetset.
El menú consistió de una ensalada mediterránea de trucha ahumada con palta y hojaldre, y un segundo plato de cuscús con pescado blanco. La mesa dulce ofreció una variedad de delicadeces desde espuma de caramelo, tiramisú, rogel, pavlova de frutos rojos, ganache de dulce de leche, red delicious strudell, mousse de chocolate, de maracuyá, y de chocolate blanco, y helados de frutas, crema y chocolate.
"Por suerte empezó puntual, y de los invitados me sorprendió que se hayan quedado todos hasta tan tarde, sobre todo después de haber tomado y disfrutado de un catering tan bueno. Había que ir hasta allá, de la Capital es más o menos una hora y cuarto de viaje, por suerte llegaron todos a salvo a sus hogares (risas)", contó la flamante esposa de Garfunkel.
Para contraer matrimonio con el nieto de Boris Garfunkel, fundador en la Argentina del Grupo BGH, Vanucci debió onvertirse al judaísmo.
"Necesitaba estar convertida para la ceremonia religiosa, y hace dos semanas aprobé el examen final ante un comité rabínico. Además, tuve que firmar un contrato en el que me comprometo a cumplir con todos los requisitos que llevan a uno a ser judío viniendo de otra religión. Tengo que seguir estudiando y llevar a la práctica muchas de las festividades", concluyó feliz.
"Me siento una Cenicienta. Me sorprendió mucho tener un marido como el que tengo, para mí Matías es el marido ideal. Me dio tantos gustos y tantas sorpresas que todavía estoy obnubilada", confesó la modelo a la revista CARAS, luego de la celebración y antes de irse de "luna de miel" por las principales carreteras de Europa.
En sólo un año y medio la pareja vivió una variedad de sensaciones -enamorarse, distanciarse, reconciliarse, la pérdida de dos embarazos- y decidieron consolidar las experiencias vividas juntos, con el sí ante el altar.
"Después del duro golpe que sufrimos, Matías quería casarse rápido. El más que nada lo hizo por mí, y con la ayuda de la wedding planner, Lucila Sperber, se ocuparon de todo para llegar a organizaría en tiempo récord", contó Vanucci.
La fiesta tuvo lugar el sábado 31 de marzo en la estancia "La Celeste", el campo que el empresario posee en San Miguel del Monte.
La fiesta incluyó un imponente show de fuegos artificiales, una presentación en vivo de Vicentico, una decoración esmerada, y la asistencia de famosos y figuras del Jetset.
El menú consistió de una ensalada mediterránea de trucha ahumada con palta y hojaldre, y un segundo plato de cuscús con pescado blanco. La mesa dulce ofreció una variedad de delicadeces desde espuma de caramelo, tiramisú, rogel, pavlova de frutos rojos, ganache de dulce de leche, red delicious strudell, mousse de chocolate, de maracuyá, y de chocolate blanco, y helados de frutas, crema y chocolate.
"Por suerte empezó puntual, y de los invitados me sorprendió que se hayan quedado todos hasta tan tarde, sobre todo después de haber tomado y disfrutado de un catering tan bueno. Había que ir hasta allá, de la Capital es más o menos una hora y cuarto de viaje, por suerte llegaron todos a salvo a sus hogares (risas)", contó la flamante esposa de Garfunkel.
Para contraer matrimonio con el nieto de Boris Garfunkel, fundador en la Argentina del Grupo BGH, Vanucci debió onvertirse al judaísmo.
"Necesitaba estar convertida para la ceremonia religiosa, y hace dos semanas aprobé el examen final ante un comité rabínico. Además, tuve que firmar un contrato en el que me comprometo a cumplir con todos los requisitos que llevan a uno a ser judío viniendo de otra religión. Tengo que seguir estudiando y llevar a la práctica muchas de las festividades", concluyó feliz.