Krugman tiene razón (en Europa)
* Por Tomás Bulat. Un muy breve y sintético artículo de Paul Krugman desató un vendaval de comentarios.
Esa nota, mucho más larga e interesante que la de Krugman, plantea lo que en Argentina conocemos en detalle: que cuando atás tu moneda a la de otro país, en la bonanza está todo bien; pero en recesión, todos los problemas se acumulan y las políticas de ajuste solo traen como consecuencia problemas mayores.
De hecho, en ese artículo Yglesias dice que "la devaluación y el default no fueron una fiesta" y agrega "el abandono de la convertibilidad calificó a la Argentina como un mal lugar donde invertir dinero. El gobierno de Néstor y Cristina ha seguido una serie de dudosas políticas energéticas y promueven una fuerte dinastía. Para todos nuestros problemas EE.UU. es mucho más rico y disfruta de muchas mejores instituciones que Argentina y nada sustituye a buenas instituciones"
Es a este artículo que Krugman decide agregarle algo y le agrega el gráfico de crecimiento del PBI comparativo con Brasil y su observación de los comentarios de la prensa, en general malos contra la política económica de Argentina.
Krugman, Indec y crecimiento
Muchas de las críticas a Krugman tienen que ver con el gráfico en el que usa datos del INDEC sobre crecimiento económico, que todos sabemos están sobreestimados. Pero de todas maneras es importante metodológicamente aclarar algo:
La tasa de crecimiento que un país tiene es la cantidad de bienes y servicios de consumo final que produce ese país en un año. Así por ejemplo si un peluquero en un año hace 100 cortes de pelo y al año siguiente hace 110, entonces el crecimiento del PBI es del 10%. Pero esto no incluye el precio. Supongamos que el corte de pelo lo cobró a 10 pesos, entonces agrega valor por 1000 pesos, es decir 100 pesos por 10 cada corte.
Ahora bien, supongamos que esos cortes de pelo se producían con 1 dólar = 1 peso, por lo cual cada uno agregaba 10 dólares de valor. ¿Qué pasa si hay una fuerte devaluación, por ejemplo de 4 a 1? Es decir que el corte de pelo, que si bien vale 10 pesos, pasa a valer 2,5 dólares. Por lo tanto si ahora la economía crece un 10%, en lugar de agregar 100 dólares de valor, agrega solo 25 dólares.
Es decir que al medir el crecimiento del PBI en cantidades, es sólo una parte de la historia que se completa al medir también con una moneda internacional como el dólar. Por ejemplo si en Brasil el corte de pelo vale 10 dólares y en Argentina 5 dólares, un crecimiento del 10% del PBI en Brasil agrega 1 dólar, mientras que un crecimiento del 15% del PBI en Argentina agrega 75 centavos.
Esto es lo que hace que a nivel internacional Brasil sea tanto más significativo que Argentina.
En el gráfico que adjuntamos se muestra el crecimiento del PBI medido en dólares corrientes tanto de Brasil como de Argentina entre el 2000 y el 2010. Como se observa, mientras Brasil casi cuadruplicó su PBI, Argentina apenas lo subió un 30%.
Por supuesto que el crecimiento del PBI en cantidades en Argentina subió y mucho en estos años, pero eso es parte de la historia, también lo debe ser en valor internacional, porque eso es lo que nos marca la riqueza relativa de cada país.
Krugman tiene razón
Paul Krugman tiene razón en decir que la política del ajuste solo lleva a que Europa entre en más recesión o, como plantea Ybarra, que el Euro hunde a Europa. Pero eso no tiene nada que ver con lo que pasa en Argentina hoy.
Los problemas de Argentina ya no son los de la convertibilidad. NO tenemos más ese problema. Ahora se parecen más a los problemas de los 70: la inflación, la economía cerrada, los permanentes reclamos, el déficit energético,etc.
Los problemas son otros y, por supuesto, las soluciones también.
De hecho, en ese artículo Yglesias dice que "la devaluación y el default no fueron una fiesta" y agrega "el abandono de la convertibilidad calificó a la Argentina como un mal lugar donde invertir dinero. El gobierno de Néstor y Cristina ha seguido una serie de dudosas políticas energéticas y promueven una fuerte dinastía. Para todos nuestros problemas EE.UU. es mucho más rico y disfruta de muchas mejores instituciones que Argentina y nada sustituye a buenas instituciones"
Es a este artículo que Krugman decide agregarle algo y le agrega el gráfico de crecimiento del PBI comparativo con Brasil y su observación de los comentarios de la prensa, en general malos contra la política económica de Argentina.
Krugman, Indec y crecimiento
Muchas de las críticas a Krugman tienen que ver con el gráfico en el que usa datos del INDEC sobre crecimiento económico, que todos sabemos están sobreestimados. Pero de todas maneras es importante metodológicamente aclarar algo:
La tasa de crecimiento que un país tiene es la cantidad de bienes y servicios de consumo final que produce ese país en un año. Así por ejemplo si un peluquero en un año hace 100 cortes de pelo y al año siguiente hace 110, entonces el crecimiento del PBI es del 10%. Pero esto no incluye el precio. Supongamos que el corte de pelo lo cobró a 10 pesos, entonces agrega valor por 1000 pesos, es decir 100 pesos por 10 cada corte.
Ahora bien, supongamos que esos cortes de pelo se producían con 1 dólar = 1 peso, por lo cual cada uno agregaba 10 dólares de valor. ¿Qué pasa si hay una fuerte devaluación, por ejemplo de 4 a 1? Es decir que el corte de pelo, que si bien vale 10 pesos, pasa a valer 2,5 dólares. Por lo tanto si ahora la economía crece un 10%, en lugar de agregar 100 dólares de valor, agrega solo 25 dólares.
Es decir que al medir el crecimiento del PBI en cantidades, es sólo una parte de la historia que se completa al medir también con una moneda internacional como el dólar. Por ejemplo si en Brasil el corte de pelo vale 10 dólares y en Argentina 5 dólares, un crecimiento del 10% del PBI en Brasil agrega 1 dólar, mientras que un crecimiento del 15% del PBI en Argentina agrega 75 centavos.
Esto es lo que hace que a nivel internacional Brasil sea tanto más significativo que Argentina.
En el gráfico que adjuntamos se muestra el crecimiento del PBI medido en dólares corrientes tanto de Brasil como de Argentina entre el 2000 y el 2010. Como se observa, mientras Brasil casi cuadruplicó su PBI, Argentina apenas lo subió un 30%.
Por supuesto que el crecimiento del PBI en cantidades en Argentina subió y mucho en estos años, pero eso es parte de la historia, también lo debe ser en valor internacional, porque eso es lo que nos marca la riqueza relativa de cada país.
Krugman tiene razón
Paul Krugman tiene razón en decir que la política del ajuste solo lleva a que Europa entre en más recesión o, como plantea Ybarra, que el Euro hunde a Europa. Pero eso no tiene nada que ver con lo que pasa en Argentina hoy.
Los problemas de Argentina ya no son los de la convertibilidad. NO tenemos más ese problema. Ahora se parecen más a los problemas de los 70: la inflación, la economía cerrada, los permanentes reclamos, el déficit energético,etc.
Los problemas son otros y, por supuesto, las soluciones también.