Jugador de Independiente, asaltado por "viudas negras"
El volante Walter Busse y su hermano fueron víctimas de tres mujeres que los drogaron hasta dormirlos y luego les robaron el auto y objetos personales.
El volante de Independiente Walter Busse y su hermano fueron víctimas de tres mujeres que los despojaron de sus bienes tras dormirlos con drogas, en el departamento que el jugador tiene en el barrio porteño de Caballito, en un golpe cometido con la modalidad conocida como
"viudas negras".
El futbolista jujeño, de 24 años, que actuó en los últimos minutos en el partido del sábado pasado en el que su equipo empató 2 a 2 frente a All Boys, tuvo que ser despertado varias horas después del robo por el médico del plantel profesional "rojo", en su departamento, de acuerdo con la información publicada hoy por el diario Crónica.
Según se indicó, la historia comenzó cuando Walter Busse y su hermano cenaban en un restaurante de la zona de Puerto Madero, donde conocieron a tres mujeres, con las que establecieron una conversación y convinieron luego en marcharse juntos del lugar, en el auto Mini Cooper perteneciente al jugador.
En el departamento de Caballito, siguió su curso el encuentro de cinco participantes, con buenos momentos, hasta que el volante de Independiente y su hermano se desvanecieron, aparentemente por el efecto de drogas que las invitadas les habrían colocado en las bebidas que tomaron.
Los jóvenes recién fueron despertados por el médico del plantel profesional de Independiente, Luis Scharadía, quien acudió al departamento al otro día, al ser convocado por allegados que dijeron no poder despertar a los dos jóvenes.
Las "viudas negras" se habían llevado dinero y otros objetos de valor, además del auto del jugador, y por el momento se mantenían prófugas, de acuerdo con la información que trascendió.
El episodio marcó una mancha en la recuperación del jugador, experimentada a partir del año que estuvo inactivo por una dura lesión sufrida durante 2010, cuando pareció la ruptura de tibia y peroné.
"viudas negras".
El futbolista jujeño, de 24 años, que actuó en los últimos minutos en el partido del sábado pasado en el que su equipo empató 2 a 2 frente a All Boys, tuvo que ser despertado varias horas después del robo por el médico del plantel profesional "rojo", en su departamento, de acuerdo con la información publicada hoy por el diario Crónica.
Según se indicó, la historia comenzó cuando Walter Busse y su hermano cenaban en un restaurante de la zona de Puerto Madero, donde conocieron a tres mujeres, con las que establecieron una conversación y convinieron luego en marcharse juntos del lugar, en el auto Mini Cooper perteneciente al jugador.
En el departamento de Caballito, siguió su curso el encuentro de cinco participantes, con buenos momentos, hasta que el volante de Independiente y su hermano se desvanecieron, aparentemente por el efecto de drogas que las invitadas les habrían colocado en las bebidas que tomaron.
Los jóvenes recién fueron despertados por el médico del plantel profesional de Independiente, Luis Scharadía, quien acudió al departamento al otro día, al ser convocado por allegados que dijeron no poder despertar a los dos jóvenes.
Las "viudas negras" se habían llevado dinero y otros objetos de valor, además del auto del jugador, y por el momento se mantenían prófugas, de acuerdo con la información que trascendió.
El episodio marcó una mancha en la recuperación del jugador, experimentada a partir del año que estuvo inactivo por una dura lesión sufrida durante 2010, cuando pareció la ruptura de tibia y peroné.