Jubilado acabó con su vida porque le robaron 45 mil dólares
Un hombre de 85 años fue víctima de una pareja oportunista que le realizó el "cuento del tío" y terminó quedándose con todos sus ahorros.
Un anciano de 85 años al que hace dos días una pareja de delincuentes le había robado 45 mil dólares de sus ahorros y joyas con el "cuento del tío", se suicidó ayer tras sufrir un profundo estado depresivo por la sustracción de su dinero.
Fuentes policiales informaron que la víctima se quitó la vida ahorcándose con un cinturón atado a la puerta de su habitación de su casa de Araujo al 800, en el barrio porteño de Mataderos.
Los voceros revelaron que el hombre, quien había sido estafado por los maleantes el pasado miércoles, se encontraba con una fuerte depresión provocada por el robo de sus ahorros en dólares, aunque hacía ya un tiempo que estaba mal anímicamente tras el fallecimiento de su esposa.
El hombre fue encontrado muerto en su cuarto por un familiar suyo que se había acercado a su casa para cuidarlo y contenerlo por el robo de sus ahorros de hacía dos días, quien rápidamente llamó a la policía. Al lugar acudieron agentes de la seccional 42 y de la Policía Científica, quienes comprobaron que el anciano había sufrido una asfixia tras ahorcarse con un cinturón sujeto a la puerta.
El robo ocurrió el pasado miércoles cuando un hombre y una mujer de unos 40 años se presentaron en su vivienda fingiendo ser representantes de una sucursal bancaria del barrio. En esa ocasión, los falsos empleados le dijeron al anciano que estaban allí para contarle que los billetes de dólares estadounidenses habían cambiado de apariencia, entonces le preguntaron si tenía dinero en esa moneda para revisarlos y supuestamente indicarle si debía cambiarlos.
El hombre fue a buscar sus ahorros a su habitación, unos 45 mil dólares, y se los acercó a la pareja para mostrárselos. En ese momento el dueño de casa volvió a su cuarto para buscar otros billetes, situación aprovechada por los estafadores para sustraer varias joyas de la víctima y otros valores y finalmente escapar con esos objetos y con los 45 mil dólares que les había acercado el hombre segundos antes. Más tarde, al darse cuenta de que la pareja ya no estaba en la casa, el anciano advirtió que había sido víctima de un "cuento del tío" y rápidamente llamó a un sobrino, quien luego denunció el hecho a la policía.
Fuentes policiales informaron que la víctima se quitó la vida ahorcándose con un cinturón atado a la puerta de su habitación de su casa de Araujo al 800, en el barrio porteño de Mataderos.
Los voceros revelaron que el hombre, quien había sido estafado por los maleantes el pasado miércoles, se encontraba con una fuerte depresión provocada por el robo de sus ahorros en dólares, aunque hacía ya un tiempo que estaba mal anímicamente tras el fallecimiento de su esposa.
El hombre fue encontrado muerto en su cuarto por un familiar suyo que se había acercado a su casa para cuidarlo y contenerlo por el robo de sus ahorros de hacía dos días, quien rápidamente llamó a la policía. Al lugar acudieron agentes de la seccional 42 y de la Policía Científica, quienes comprobaron que el anciano había sufrido una asfixia tras ahorcarse con un cinturón sujeto a la puerta.
El robo ocurrió el pasado miércoles cuando un hombre y una mujer de unos 40 años se presentaron en su vivienda fingiendo ser representantes de una sucursal bancaria del barrio. En esa ocasión, los falsos empleados le dijeron al anciano que estaban allí para contarle que los billetes de dólares estadounidenses habían cambiado de apariencia, entonces le preguntaron si tenía dinero en esa moneda para revisarlos y supuestamente indicarle si debía cambiarlos.
El hombre fue a buscar sus ahorros a su habitación, unos 45 mil dólares, y se los acercó a la pareja para mostrárselos. En ese momento el dueño de casa volvió a su cuarto para buscar otros billetes, situación aprovechada por los estafadores para sustraer varias joyas de la víctima y otros valores y finalmente escapar con esos objetos y con los 45 mil dólares que les había acercado el hombre segundos antes. Más tarde, al darse cuenta de que la pareja ya no estaba en la casa, el anciano advirtió que había sido víctima de un "cuento del tío" y rápidamente llamó a un sobrino, quien luego denunció el hecho a la policía.