José López e Ibar Pérez Corradi, la punta del iceberg del financiamiento ilegal de la política
Los dos arrestados parecen ser apenas dos exponentes del ejército de donantes fantasma que alimentan las arcas de los partidos.
José López e Ibar Pérez Corradi habrían financiado las cuentas kirchneristas a través de la malversación de fondos en la obra pública y con "La mafia de los medicamentos", por lo que prometen continuar en el centro de la escena judicial tras el procesamiento de los recaudadores del FPV de las elecciones de 2007.
Es que ambos se erigen como el fiel reflejo de los manejos turbios de la política, que afloran en especial en épocas previas a las elecciones y que la Justicia promete investigar con mayor ahínco.
El caso de López podría resumir el uso que la gestión kirchnerista le dio al Ministerio de Planificación que condujo Julio De Vido durante los 12 años. Ricardo Jaime, Claudio Uberti, José María Olazagasti, entre otros, fueron los engranajes del mecanismo de corrupción que le habría permitido dotar al entonces gobierno de grandes inyecciones monetarias.
En el caso de Pérez Corradi, por su parte, el juez federal Ariel Lijo vinculó esta semana los aportes que recibió FPV por cientos de miles de pesos durante la campaña presidencial de 2007 con la mafia de los medicamentos. Pero también los asoció con el narcotráfico y el "tráfico de efedrina".
El esquema incluyó otros rubros, por ejemplo el juego, con Cristóbal López como el empresario más asociado al kirchnerismo, y miles de proveedores del Estado en áreas muy distintas entre sí, como salud, seguridad, informática, papelería y muchas más, según cuenta La Nación.
La ilícita maquinaria electoral
Los tres principales partidos de las pasadas elecciones; Cambiemos, Frente para la Victoria y UNA; están en la mira de la Cámara Federal Electoral debido a las irregularidades encontradas en la financiación de sus respectivas campañas.
Los partidos políticos evitan designar a dirigentes activos porque la ley de financiamiento electoral fijó como castigo para los responsables económicos la inhabilitación para ocupar cargos públicos si sus balances no son aprobados por la Justicia
Por lo tanto, donantes sin capacidad económica, reconocidos asesores que no fueron declarados, aportantes fantasmas, y millonarios gastos ilícitos previos a la campaña son las principales manchas que se destacan, según La Nación.