Jorge Rial hizo una fuerte revelación sobre su salud
El conductor de Intrusos comenzó su programa de manera diferente.
Jorge Rial abrió un nuevo programa de Intrusos sin referirse a algún escándalo mediático y la pelea de dos personajes de la farándula, ni tampoco pronunciándose políticamente como lo ha sabido hacer en previas ocasiones. Esta vez, el conductor de América decidió revelar un detalle importante sobre su salud.
Visiblemente relajado y contento, el periodista ingresó al estudio de su histórico ciclo tras la introducción del locutor Fabián Cerfoglio al ritmo de You Are The First, My Last, My Everything de Barry White y le contó a los presentes allí, al igual que a todos sus televidentes, que está muy feliz por ir a terapia.
"¿Cómo andan? Bienvenidos, ¿cómo están, todo bien? Yo estoy muy bien, es un buen día, tranquilo, porque estuve en terapia y cuando voy a terapia vengo bien", confesó Rial.
Sin embargo, el periodista generó sorpresa en sus compañeros de intrusos al dar más detalles de las sesiones a las que asiste. "Voy los martes y viernes, dos veces por semana", reveló ante sus panelistas y equipo, a quienes criticó durante la semana pasada debido a la entrevista que le realizaron al cirujano traumatólogo Diego Eyharchet, el doctor que fue considerado un sex symbol en las redes y que estuvo encargado de operarle la rodilla derecha a Diego Armando Maradona en la Clínica Olivos.
"¿Dos veces por semana?", preguntó sorprendida Ángeles Balbiani, mientras que Débora D'Amato lo defendió y redobló la apuesta al comentar que durante un momento de su vida, ella iba a terapia todos los días de la semana.
"Nunca fui a más de dos, pero he tenido etapas en las que tendría que haber estado internado, quedarme a vivir ahí", aseguró Jorge a modo de broma.
Con el paso del tiempo, se verá si el conductor de América se anima a dar más datos del proceso que utiliza para cuidar su salud mental, o quizás se atreva a contar detalles de lo que trabaja sentado en el diván. Por el momento, todo lo que suceda dentro de las cuatro paredes del consultorio en donde se atiende Rial pertenece guardado, obviamente, bajo las siete llaves del secreto profesional.