Jorge Macri saca del ministerio de Seguridad a Waldo Wolff y lo reemplaza con Horacio Giménez

Tras la seguidilla de fugas de presos en las comisarías porteñas y en medio de la campaña electoral para las legislativas de octubre, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, tomó la decisión de desplazar del Ministerio de Seguridad a Waldo Wolff, quien pasará a cumplir funciones internas con vistas a los comicios.

El cargo del saliente funcionario será ocupado por Horacio Giménez, quien fue jefe de la Policía Metropolitana, como se denominó a la fuerza desde su inicio en 2008 hasta que en 2017 pasó a llamarse Policía de la Ciudad.

Fuentes oficiales confirmaron a Clarín que la medida será anunciada en la tarde de este lunes.

Wolf fue ministro de Seguridad de la Ciudad durante 14 meses con foco en las detenciones como política de control. El número de detenidos alcanzó un récord para la Ciudad de alrededor de 100 personas por día, en promedio.

Ese ritmo acelerado de los arrestos intensificó el problema de los detenidos en la Ciudad de Buenos Aires, donde hay alrededor de 2,400 presos en comisarías, alcaidías y anexos.

Durante la gestión de Wolf hubo 24 evasiones, algo así como una fuga de presos cada tres semanas, lo cual lo tuvo en el centro de las críticas.

Los cruces con Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad de la Nación, por la falta de cupos para descomprimir las comisarías porteñas, lo tuvieron como protagonista en las últimas semanas.

“Tienen que estar en cárceles federales. Lo saben todos. Tenían que estar en la época en que (María Laura) Garrigós de Rebori manejaba el SPF (Servicio Penitenciario Federal) y tienen que estar hoy", dijo Wolff luego de la última fuga en una comisaría de Caballito.

Entonces acusó a Bullrich de "faltar a la verdad" luego de que la ministra lo cuestionara duramente y le dijera: "No puedo aceptar que digan ‘yo me hago cargo’, cuando todos los días se le escapa un preso, entonces no se hace cargo. Los presos son de la Ciudad”.

La fuga de presos en comisarías porteñas ya había derivado en la salida de Diego Kravetz, su jefe de Policía, quien fue designado como el número dos de la Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE) para secundar a Sergio Neiffert.

Giménez llegó a la Metropolitana desde la Policía Federal. Estaba a cargo de la fuerza cuando ocurrió la represión a los trabajadores del Hospital Borda el 26 de abril de 2013.

En aquel entonces, un grupo de médicos, pacientes y empleados estatales se concentró en el centro de salud para oponerse a la demolición de un taller protegido, donde se produjeron graves incidentes. Del total de 36 heridos, 19 fueron manifestantes y 17 eran agentes de la fuerza de seguridad.