DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Jorge Lanata y "el origen" del kirchnerismo: "La generación de los 70 nos arruinó la vida"

El periodista, en una entrevista íntima, se refirió a la actualidad del país y comparó a los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner con el actual de Mauricio Macri.

El periodista Jorge Lanata brindó su filoso análisis de la sociedad argentina actual en una entrevista íntima  con La Nación, donde comparó a los mandatos de Néstor y Cristina Kirchner con el actual gobierno de Mauricio Macri. Para ello, no pudo evitar referirse a los años '70, a lo que él considera "el origen" del kirchnerismo.

"Yo creo que la generación de los 70 nos arruinó la vida. Realmente nos cagó la vida. Nos mintieron. Lo hablé con muchos de ellos en términos nada lindos. Con [José] Saramago, un día en una comida, acá, donde estábamos con él, con [Manuel] Vázquez Montalbán y Martín Caparrós. Yo les pregunté: '¿por qué nos mintieron?'", dijo Lanata.

Y agregó: "Los que nos decían que los chicos pioneros en La Habana estaban ahí levantando el puño y diciendo: Seremos como El Che. Los Montoneros, el ERP, los que sean. [Ernesto] Sabato decía que, durante tu vida, vas pasando por diferentes etapas, pero al final todo se divide en una lucha entre el bien y el mal. Yo llegué a esta pregunta: ¿Soy capaz de dispararle a un tipo desarmado en un sótano? Mi respuesta es no. ¿Y Verbitsky? Verbitsky sí. Es ésa la diferencia. Todo lo demás es anécdota. Yo estaba ahí. Página jamás fue un diario que reivindicara la lucha armada".

Asimismo, Lanata refirió que los años 70 fueron una década que puede explicar el fenómeno del kirchnerismo como su "origen".

"Los que integraron las organizaciones armadas y esa generación piensan igual que entonces, por eso existió el kirchnerismo. ¿Qué consolida al kirchnerismo? Que ellos ven que es el último tren. Que se mueren. La generación de Horacio González y toda esta gente. La Conferencia Episcopal Argentina puso en marcha una propuesta de "reconciliación". ¿Cuán posible la ves? Yo insisto en que la grieta es lo peor que nos pasa y va a tardar en cerrarse. Es lo más difícil de superar. Hasta ahora tengo razón porque todos quieren dejar de hablar, pero nadie deja de hacerlo", indicó.

Y luego dio su visión de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. "A ver: ¿usted es antikirchnerista? Sí, claro que sí. ¿Y haré todo lo posible para que el kirchnerismo no vuelva? Sí. Pero eso no quiere decir que vaya a inventar una nota para que no vuelvan. Ahora, si yo puedo dar una mano para que esto no pase, lo voy a hacer", señaló el periodista.

"Creo que sería volver para atrás 20 años. Sería un desastre. Vos no podés hacer política en un mundo que ya no existe más, cuyos aliados eran Venezuela e Irán. Es una locura. Hoy parece que nos hubiéramos despertado de un mal sueño, ¡pero fue raro que fuera tan largo y no nos despertáramos antes! Evidentemente algo kirchneristas somos porque si no, no hubiera pasado. Mirá la época de la dictadura: había mucha gente que estaba de acuerdo y mucha otra que no, pero que no hicieron nada para sacarla hasta muy tarde. En otros países sí hicieron, como los cacerolazos de Uruguay o la Iglesia brasileña que estaba en contra. Hicieron más cosas que nosotros. Acá de la dictadura se salió más que nada por Malvinas, ni siquiera por nosotros. Creo que llevamos mucho tiempo autoengañándonos y eso se tiene que terminar. Digamos la verdad: ¿estás en contra de tal cosa? Sí, estoy en contra", se explayó.

Luego comparó las gestiones anteriores con la actual de Macri y marcó sus limitaciones.

"Yo voté a Macri, nunca lo había votado antes. Pero no sé si volveré a votarlo, dependerá de las circunstancias. Yo no soy de Cambiemos. A nivel personal tengo con Macri un diálogo buenísimo porque él se banca lo que pienso, no le hablo pensando que estoy ante el Presidente sino frente al que conozco hace treinta años. Eso es bueno. Publiqué varias notas en contra de Macri y lo critiqué por cosas que realmente creo que estaban mal. Macri podría haber hecho una multipartidaria para hacer un ajuste más sensato y que no caiga sobre los sectores más pobres y no lo hizo y ahora se le pasó el momento. Cuando asumió no dijo que estábamos quebrados y debería haberlo dicho porque la bomba nunca explotó. Entonces a la gente le contaron que había una bomba. No es lo mismo", aseguró.

"Lo otro que me desilusiona es que Macri no está atacando las enfermedades fundamentales de la Argentina. Por ejemplo, que el país gasta más de lo que gana. Ahora la guita la pedimos afuera, pero sigue pasando. Eso tiene que ver con que Macri no es un líder político, es un dirigente. Discutí mucho con él en privado sobre las demandas de la gente y las acciones del político. Él cree que no hay que poner en agenda más que las demandas manifiestas de la gente y yo pienso que es totalmente al revés", continuó.

Y sentenció: "Bastante paciencia le estamos teniendo los medios a Macri. Con otro gobierno, por cosas mucho menores, ya hubiésemos saltado. Y en el caso de Macri todo el mundo está más tranquilo buscando cómo lo justifica. Y me parece bien que haya esa diferencia, porque son cosas distintas. Una cosa son los tipos tirando bolsos con plata por arriba de una iglesia y otra cosa son estos metiendo la gamba por una estupidez. En los errores de estos tipos también hubo muchísimo de idiotez, entonces decís, bueno, dejalo pasar. Yo hasta hace unos meses pensé que el Gobierno iba a perder en octubre. Después de la marcha del 1° de abril creo que el estado de ánimo cambió bastante y que si no se mandan ninguna cagada, ganan. Por poco, pero ganan".