Javier Milei reclamó la “liberación inmediata” del gendarme detenido en Venezuela y habló de “secuestro ilegal”

Javier Milei habló este martes sobre la detención de Nahuel Agustín Gallo, el gendarme detenido por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. El Presidente habló de "secuestro ilegal" y adelantó que agotará instancias para la "liberación inmediata" del gendarme argentino, que lleva más de una semana preso.

"Fue detenido por las fuerzas de seguridad a cargo del dictador criminal Nicolás Maduro por el único delito de visitar a su pareja y su hijo. Exigimos su liberación inmediata y agotaremos todas las vías diplomáticas para devolverlos sano y salvo a la Argentina", dijo Milei, en la entrega de medallas y sables en el Colegio Militar.

El mandatario le dedicó a Gallo (27 años) las primeras palabras de su discurso, en un acto en el que estuvo acompañado por el ministro de Defensa, Luis Petri. Fue enfático para reclamarle a Maduro que ponga en libertad al gendarme, un día después de que Diosdado Cabello confirmara que tienen preso al argentino.

Gallo viajaba a Venezuela para reencontrarse con María Gómez, su pareja, y un hijo de 2 años que residen en ese país hace unos siete meses. Sin embargo, lo detuvieron cuando hacía migraciones para entrar a tierras venezolanas, tras cruzar un paso fronterizo terrestre desde Colombia.

Fue "retenido" por autoridades de Contrainteligencia, que lo acusaron de espionaje. Este lunes, Cabello -virtual número 2 del régimen- sembró sospechas sobre supuestos numerosos viajes al exterior realizados por Gallo, con "un salario de 500 dólares mensuales", según indicó el dirigente chavista.

Desde el Gobierno nacional, salieron a desmentir al régimen de Maduro y aclararon que entre 2018 y 2024 Gallo salió sólo ocho veces del país y lo hizo siempre por vía terrestre a países limítrofes.

"Liberá de inmediato a Nahuel Gallo o atenete a las consecuencias. Cada minuto que lo retenés, quedás más expuesto como el opresor miserable que sos. La libertad nunca se arrodilla ante dictadores", manifestó Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, en un posteo en redes sociales el lunes a la noche.

Para el reencuentro con su familia, Gallo había comprado un itinerario de viaje económico. Por eso, cruzó por el Paso Cristo Redentor desde Mendoza (donde trabaja) hacia Chile el 6 de diciembre a las 15.47. En Santiago tomó un primer vuelo el 7 de diciembre a las 0.50, que lo depositó en Bogotá. Allí pasó varias horas en el aeropuerto: arribó a la madrugada y el segundo avión salió con demoras a las 22, hacia Cúcuta

Pasó la noche en un hotel de esa ciudad fronteriza. Dejó el alojamiento temprano, ya que a las 5.30 se dirigió en remís al Puente Internacional Simón Bolívar para cruzar a Táchira, de donde debía tomar un vuelo a Caracas.

Hizo la salida de Colombia a las 7 de la mañana. Cuarenta minutos lo frenaron cuando trataba de ingresar a tierras venezolanas. A las 10.57, a través del celular del remisero, Gallo se comunicó con su esposa. Le dijo que lo llevaban a una "segunda entrevista" en migraciones. Más tarde, tras conocerse la noticia de la detención, el chofer que lo había llevado al puente aseguró que lo vio por última vez a bordo de un auto negro.

El sábado, Bullrich afirmó que Gallo se encontraría en una base de inteligencia en Táchira. Sin embargo, un día después desde el Gobierno sostuvieron la versión de que lo habrían trasladado al Helicoidal, un temido centro de torturas en Caracas.

En un primer momento, la esposa del gendarme (de nacionalidad venezolana y, según dijo, con años de residencia en Argentina) aseguró que a su marido lo complicaron mensajes que le envió ella a mitad de año, luego de volver a Venezuela y en plena polémica por las elecciones en las que Maduro se autoproclamó presidente pese a las numerosas denuncias de fraude y a los reclamos internacionales que dieron como vencedor a Edmundo González Urrutia.

La gestión de Milei dejó en manos de Cancillería y del Ministerio de Seguridad las conversaciones para lograr la liberación de Gallo.

En las primeras horas se habría intentado que Brasil -que custodia la embajada argentina en Caracas, bajo asedio del régimen- y Colombia intercedieran para conseguir la puesta en libertad del gendarme.

Ahora, las autoridades nacionales evalúan llegar hasta el papa Francisco para resolver la situación de Gallo, que -de acuerdo a las acusaciones de Milei y la propia Bullrich- está "secuestrado" por el régimen chavista.