Jardín del horror: "La habilitación era de taller recreativo y salón de juegos"
Por Luciano Fryszberg. En una nota exclusiva para DiarioVeloz.com, la madre de un alumno del "Jardín del horror" de Comodoro Rivadavia nos contó detalles del lugar y cómo era el trato con los chicos.
Por Luciano Fryszberg
@luchofry
lfryszberg@diarioveloz.com
El caso del "Jardín del horror" en Comodoro Rivadavia resuena cada vez más y es un escándalo nacional. En exclusiva DiarioVeloz.com habló con la mamá de uno de los chiquitos que van al colegio "La hormiguita viajera".
"A mi hijo lo mando hace más de un mes al jardín. Me lo recomendaron con excelentes referencias. Fue uno de los que más me gusto en la ciudad. Los primeros días volvía angustiado y no se quería quedar. En las últimas semanas quería ir al jardín y volvía contento. No habíamos notado nada raro. Lo que sí me llamaba la atención es que volvía muy peinado, demasiado prolijo. Lo que se rumoreaba es que a los nenes les mojaban la cabeza con agua fría aparentemente cuando lloraban mucho. Ahí uno pensaba que podía ser uno de los malos tratos", sostuvo la madre del pequeño.
La madre del chiquito no quiso develar su identidad por una cuestión de seguridad pero nos contó que no se hacían los controles indicados en el establecimiento: "La directora es la secretaria. Yo con ella no entablé ninguna conversación hasta ayer que nos tuvo que dar explicaciones. La que hacía el manejo en el jardín era la encargada. La dueña y propietaria depositó mucha confianza en la encargada y el plantel docente y prácticamente no hacían los controles que cualquier dueño tiene que hacer en una institución. Yo cuando anoté a mi hijo lo hice con la encargada. Ella es la que sabía cuantos alumnos concurrían al jardín, los horarios, cuánto se cobraba la cuota".
Sobre los precios de la cuota del jardín "La hormiguita viajera", la mamá dijo: "Ayer nos encontramos con una gran diferencia de precios entre los papás. Había chicos que iban en una jornada de 7 horas y pagaban menos de lo que yo abonaba por cuatro horas y media. Las cuotas oscilaban desde los setecientos pesos hasta mil quinientos".
"A nosotros el paquete que nos vendían era que funcionaba como un jardín maternal. La habilitación que tenía este lugar era como un taller recreativo y salón de juegos. A los papás les decían que tenían habilitación de jardín maternal. Con respecto a las maestras se que la encargada no era docente, sí una persona con mucha trayectoria con nenes y las auxiliares, aparentemente, no son docentes. Ayer se habló que si eran estudiantes del profesorado se las iba a echar de la carrera", afirmó la madre.
La mamá del niño contó también que no se conocían entre los padres: "No teníamos reuniones de padres, nunca había. De hecho no nos conocemos entre los padres. Recién ayer porque intercambiamos datos tras la noticia. Aparentemente la única que era maestra era la profesora de plástica. La de folclore fue quien subió la nota y ayer mostró nuevos casos".
Para finalizar, mantuvo cómo recibían a los chicos cuando salían del jardín: "Nosotros recibimos a los chicos en la puerta nunca adentro del jardín. Había un palier de entrada donde ahí te daban a tu hijo. No podías entrar ni a las salitas, ni a los baños, ni al salón de usos múltiples".
@luchofry
lfryszberg@diarioveloz.com
El caso del "Jardín del horror" en Comodoro Rivadavia resuena cada vez más y es un escándalo nacional. En exclusiva DiarioVeloz.com habló con la mamá de uno de los chiquitos que van al colegio "La hormiguita viajera".
"A mi hijo lo mando hace más de un mes al jardín. Me lo recomendaron con excelentes referencias. Fue uno de los que más me gusto en la ciudad. Los primeros días volvía angustiado y no se quería quedar. En las últimas semanas quería ir al jardín y volvía contento. No habíamos notado nada raro. Lo que sí me llamaba la atención es que volvía muy peinado, demasiado prolijo. Lo que se rumoreaba es que a los nenes les mojaban la cabeza con agua fría aparentemente cuando lloraban mucho. Ahí uno pensaba que podía ser uno de los malos tratos", sostuvo la madre del pequeño.
La madre del chiquito no quiso develar su identidad por una cuestión de seguridad pero nos contó que no se hacían los controles indicados en el establecimiento: "La directora es la secretaria. Yo con ella no entablé ninguna conversación hasta ayer que nos tuvo que dar explicaciones. La que hacía el manejo en el jardín era la encargada. La dueña y propietaria depositó mucha confianza en la encargada y el plantel docente y prácticamente no hacían los controles que cualquier dueño tiene que hacer en una institución. Yo cuando anoté a mi hijo lo hice con la encargada. Ella es la que sabía cuantos alumnos concurrían al jardín, los horarios, cuánto se cobraba la cuota".
Sobre los precios de la cuota del jardín "La hormiguita viajera", la mamá dijo: "Ayer nos encontramos con una gran diferencia de precios entre los papás. Había chicos que iban en una jornada de 7 horas y pagaban menos de lo que yo abonaba por cuatro horas y media. Las cuotas oscilaban desde los setecientos pesos hasta mil quinientos".
"A nosotros el paquete que nos vendían era que funcionaba como un jardín maternal. La habilitación que tenía este lugar era como un taller recreativo y salón de juegos. A los papás les decían que tenían habilitación de jardín maternal. Con respecto a las maestras se que la encargada no era docente, sí una persona con mucha trayectoria con nenes y las auxiliares, aparentemente, no son docentes. Ayer se habló que si eran estudiantes del profesorado se las iba a echar de la carrera", afirmó la madre.
La mamá del niño contó también que no se conocían entre los padres: "No teníamos reuniones de padres, nunca había. De hecho no nos conocemos entre los padres. Recién ayer porque intercambiamos datos tras la noticia. Aparentemente la única que era maestra era la profesora de plástica. La de folclore fue quien subió la nota y ayer mostró nuevos casos".
Para finalizar, mantuvo cómo recibían a los chicos cuando salían del jardín: "Nosotros recibimos a los chicos en la puerta nunca adentro del jardín. Había un palier de entrada donde ahí te daban a tu hijo. No podías entrar ni a las salitas, ni a los baños, ni al salón de usos múltiples".