Inflación y "errores": la nueva estafa de las concesionarias

El pasado 4 de febrero, en medio de una incertidumbre económica y una inflación que parecía no tener techo, la Presidente llamó a la unión de los argentinos y arremetió contra los empresarios: "No vamos a permitir que saqueen el bolsillo de los argentinos". Parece que algunos no entendieron bien el mensaje.

En diciembre me suscribí a un plan para comprar un vehículo adjudicado en la sucursal de Forest Car ubicada en la avenida Ricardo Balbín 3550. La empleada de Ventas me indicó los pormenores del contrato y me aseguró que me entregarían el vehículo en un plazo máximo de 30 días hábiles.

"¿Cuál es el beneficio que obtienen ustedes a cambio de entregármelo con esa anticipación?", me pregunté, y se los hice saber. Un adelanto de $35.000 pesos era la única condición necesaria para comprar el adjudicado. Después debería seguir pagando las cuotas como en cualquier otro plan. "No habrá ningún gasto extra", me aseguraron.

Ahora, este plan está integrado por cuotas puras y cuotas reducidas. El pago del mencionado adelanto incluía la cancelación de las llamadas cuotas reducidas, cuyo valor es de un 50% menos que las puras. Después se sigue con el pago normal, mes a mes.

A mediados de enero, previendo una posible devaluación, llamé dos días seguidos a la encargada de Planes de Forest Car para liquidar lo antes posible el monto total del vehículo, pero no atendía el teléfono. Por eso decidí comunicarme nuevamente con Ventas, donde me explicaron que, por más que quisiera, no había posibilidad de adelantar cuotas hasta que se hiciera el patentamiento del automóvil. Una clara "movida" especulativa.

Dicho y hecho, los autos subieron aproximadamente un 20%. El valor del Chevrolet Celta 5 puertas LT que aún sigo pagando y pagaré por mucho tiempo aumentó $15.000. Ahora sí, cuando me volví a comunicar para adelantar las cuotas, me dijeron que no había problema y que lo podría hacer cuando quisiera. Pero ya era tarde.

Eso no es todo. ¿Te acordás del descuento de las cuotas puras? Bueno, ese "regalo" que te hacen al principio del plan lo cobran en las últimas cuotas. Eso sí: al valor de la cuota después de la devaluación. Unos fenómenos. Algo similar al "curro" que explica Clarín en esta nota.

Paso en limpio: considerando lo que llevo pagado de las cuotas, más los servicios como el flete, etc., etc., me deberían faltar $63.000 pesos para hacer la liquidación de lo que debo. Si le sumamos los $4.000 pesos de diferencia que tengo que pagar por las cuotas reducidas cuyo valor fue aumentado ilegalmente por la devaluación, deberían ser $67.000. Sin embargo, cuando llamo a Chevrolet me indican que para liquidar tengo que abonar $81.000. ¿De dónde salen esos $14.000 de diferencia? Nadie en Forest Car me da una respuesta clara.

La desorganización y los "errores" son constantes y diarios. Esta semana, por ejemplo, me llegó una factura para pagar la cuota ¡de diciembre! Cabe aclarar que estoy al día con el pago. Pero no solo eso: en el desglose de la factura aparecen gastos que no estaban en meses anteriores, como unos $500 por los derechos de adjudicación que, según me habían dicho, ya los había pagado.

Me olvidaba. Habían dicho que la entrega del auto se realizaría en el plazo de 30 días hábiles. Bueno, no lo van a hacer. Sin embargo, releyendo el contrato, veo que en la letra ínfima no decía lo mismo que lo asegurado de palabra docenas de veces en Forest Car, sino que el plazo es de 50 días hábiles. Mala mía...